Investigarán a Sudáfrica
FIFA sospecha de arreglo de partidos una semana antes del Mundial 2010
JOHANESBURGO, Sudáfrica (AP). El gobierno sudafricano va a establecer una investigación sobre acusaciones de arreglo de partidos antes de la Copa del Mundo del 2010, luego de una reunión efectuada ayer entre la asociación nacional de futbol y la FIFA.
El ministerio de deportes de Sudáfrica y la FIFA dijeron que hubo una “conclusión concreta” de las tres partes sobre una esperada comisión para investigar posible corrupción de partidos del equipo nacional sudafricano apenas semanas antes del torneo mundial.
La elogiada organización de la Copa del Mundo en Sudáfrica se ha visto manchada luego que un reporte de la FIFA del año pasado reveló “convincente evidencia” de que algunos de los partidos de preparación de la selección nacional para el torneo fueron arreglados.
La Asociación Sudafricana de Futbol admitió que existe evidencia de que había sido infiltrada por arregladores de partidos antes de los encuentros y que algunos de sus propios funcionarios están bajo sospechas.
El ministro sudafricano de deportes, Fikile Mbalula, el secretario general de la FIFA Jerome Valcke y el presidente de la asociación sudafricana Kirsten Nematandani se reunieron ayer en Zurich y llegaron a un acuerdo sobre una forma de progresar luego de un virtual estancamiento de las investigaciones.
La comisión independiente será establecida por el gobierno, con un mandato limitado a la investigación de irregularidades en los partidos amistosos de Sudáfrica antes de la Copa del Mundo.
Ningún jugador ha sido implicado en las acusaciones,
Por otra parte, la FIFA dijo que el asunto de si se va a despojar a Joao Havelange de su presidencia honoraria de la FIFA luego de un escándalo de sobornos será discutido en el congreso de la organización el próximo mes.
Havelange pudiera enfrentar una acción disciplinaria formal por su papel en el caso de ISL, la compañía suiza de mercadeo que vendió derechos de televisión a la Copa del Mundo antes de declararse en bancarrota en el 2001.
Un caso criminal abierto en en Suiza, vinculó a Havelange con recibir pagos de parte de ISL por cerca de 22 millones de dólares.