Lindsay Lohan entra a centro donde antes no se rehabilitó
Fiscales aseguraron que la actriz no será acusada de violar su libertad condicional tras salir de otro centro de rehabilitación
LOS ANGELES — Lindsay Lohan ingresó a una clínica de rehabilitación y no estará acusada de violar su libertad condicional tras salir de otro centro de rehabilitación luego de estar en él unos cuantos minutos, informó un fiscal este viernes.
El fiscal de Santa Monica, Terry White, dijo que recibió una confirmación de que Lohan entró a la clínica y dijo que estaba conforme con el centro en el que se encontraba la actriz. El fiscal se negó a revelar dónde estaba recibiendo tratamiento Lohan, pero una fuente cercana a la actriz, que no estaba autorizada para hablar públicamente del caso, dijo que ingresó al Centro Betty Ford en Rancho Mirage, California.
La estrella de “Liz & Dick” debe pasar 90 días en tratamiento confinado como parte de un acuerdo de culpabilidad por un delito menor tras haber tenido un incidente de tráfico en junio.
Lohan también recontrató a su vieja abogada, Shawn Holley, para que se haga cargo de sus asuntos legales. White dijo que estuvo en contacto con Holley el jueves por la noche tras horas sin saber la ubicación exacta de la actriz.
El abogado Mark Jay Heller dijo a un juez durante una audiencia el jueves que Lohan había ingresado a otro centro de rehabilitación, pero la estrella salió de él tras unos cuantos minutos.
A White le autorizaron investigar ese centro y un funcionario estatal dijo que el centro no tenía autorización para proporcionar tratamientos de rehabilitación por drogas o alcohol en los que los pacientes estuvieran confinados.
La sentencia de Lohan señala que deberá pasar tres meses sin salir del centro y también deberá recibir 18 meses de sicoterapia para evitar volver a estar tras las rejas.
En marzo presentó una declaración de nolo contendere por mentir a la policía y conducir de forma imprudente.
Lohan ha estado antes en Betty Ford. Cumplió otra rehabilitación obligatoria en el centro y en esa ocasión tampoco se salvó de los escándalos. Lohan, de 26 años, tuvo una pelea con una trabajadora del centro y a semanas de salir fue acusada de robar un collar de una joyería de Los Angeles.
Lohan sigue en libertad condicional por el caso del collar.