Hijastra de Daniel Ortega lo vuelve a acusar de abusos
Zoilamérica Ortega Murillo denunció al gobierno nicaragüense de bloquear acuerdos de cooperación a la organización que coordina
Zoilamérica Ortega Murillo, hijastra del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, durante un acto en Managua. Crédito: EFE
Managua – La hija adoptiva del presidente Daniel Ortega, Zoilamérica, denunció hoy una supuesta complicidad de Noruega en las presuntas presiones del gobierno de Nicaragua que terminaron en la cancelación la cooperación a un organismo que dirige.
Zoilamérica Ortega Murillo, directora del Centro de Estudios Internacionales (CEI), volvió a poner en la palestra pública la denuncia, que esta “intacta”, en contra de su padrastro por supuesta violación sexual a lo largo de muchos años, presentada en 1998.
Ortega Murillo declaró a La Prensa “la verdad sigue intacta” en la acusación por supuestos abusos deshonesto que llevo a los tribunales de justicia y después de una década de intentar una condena, desistió.
La justicia nicaragüense absolvió al entonces líder opositor del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), quien recuperó el poder en enero de 2007 y ejerció su segundo mandato en 2012.
Noruega canceló el financiamiento al CEI por presuntas presiones del vicecanciller Valdrack Jaentschke, según la afectada.
Sin embargo, continuaría las acciones de “funcionarios” de la legación diplomática para “instigar a personas que han trabajado con nosotros a que nos desprestigien”, afirmó.
Noruega, a través del ministro consejo de la Embajada en Guatemala, Ole Overaas, negó presiones contra la directora del CEI y dijo que mantendrá la cooperación con organizaciones de la diversidad sexual en Nicaragua a través de apoyo directo.
Overaas declaró al diario que el viceministro Jaenstschke les informó que le gobierno “prefería que nosotros encontráramos otro canal para apoyar a los grupos de la diversidad” sexual en Nicaragua aunque “nunca nos prohibieron nada”.
El convenio con el organismo finalizo en febrero pasado y no fue renovado después de cuatro años de cooperación por unos 100 mil dólares.
“Por varias razones decidimos no firmar un nuevo contrato. Vamos ahorita a colaborar más directamente con las organizaciones”, dijo.
La Cancillería nicaragüense no ha comentado el asunto que revivió la denuncia de la hijastra del mandatario sandinista, que había acaparado la atención pública durante varios años.
