Padres de NY temen crisis familiar si recortan cupones
Organizaciones aseguran que una reducción en los fondos podría suponer 70 millones menos de comidas al año en la ciudad
NUEVA YORK — Los posibles recortes federales al programa de cupones de comida (“food stamps”), podría traer graves consecuencias económicas y de salud para la población latina de Nueva York con menos ingresos, según usuarios del programa y organizaciones sociales.
El Senado está actualmente debatiendo un proyecto de ley que recortaría fondos del presupuesto destinado a ayudas para programas agrícolas con el objetivo de paliar el déficit, y que incluiría una reducción de más de $4,000 millones para el programa de cupones de comida (SNAP, como se le conoce oficialmente).
Ello supondría que los aproximadamente 300,000 hogares neoyorquinos que se acogen ahora mismo al programa, dejarían de recibir $90 menos al mes en ayudas para comer, según cálculos de la Congressional Budget Office (CBO).
“Nos pueden quitar todo, menos los food stamps”, dijo un indignado José Román López, un puertorriqueño de Washington Heights que salía ayer de comprar con cupones en una carnicería y se acababa de enterar de la noticia. “¿Es que no se dan cuenta de que los necesitamos para vivir?”
De acuerdo a la organización Food Bank of NYC, si se aprobase el proyecto de ley tal como está confeccionado ahora, podría suponer 70 millones menos de comidas al año en la ciudad de Nueva York.
Los comerciantes de comestibles también se oponen a los recortes.
“Más de la mitad de mis clientes utilizan cupones de comida”, aseguró Hernán Pérez, manager de un mini market del Alto Manhattan. “Son familias que necesitan de verdad ahorrar ese dinero en comida para poder pagar sus rentas”.
La organización que lucha por los derechos sociales y de los inmigrantes, Make the Road New York, advierte del serio peligro que podría conllevar para la salud de la población latina neoyorquina menos pudiente la elminación de fondos para el programa.
“Los cupones ayudan a muchas familias inmigrantes en Nueva York a comprar verduras frescas y comida sana en comunidades donde el acceso a este tipo de comestibles es demasiado caro”, dijo Becca Telzak, supervisora del equipo de salud de la organización. “Este beneficio promueve estilos saludables de vida a largo plazo en nuestras comunidades inmigrantes”.
La senadora por Nueva York, Kirsten Gillibrand, ha presentado una enmienda para que se retiren del proyecto de ley esos más de $4 mil millones en recortes al programa de cupones de comida.
“Las familias que están viviendo en la pobreza no son las que han endeudado a este país y no deberíamos intentar equilibrar el presupuesto a su costa”, declaró Gillibrand.