Gays buscarán legalizar matrimonios en todo EEUU
Tras la decisión que tomó la Corte Suprema de Justicia, ahora el debate está en manos de los 30 estados que prohíben estas uniones
Washington – La decisión que tomó ayer la Corte Suprema de Justicia de EE.UU. sobre los matrimonios gay ha alentado a quienes confían en ver algún día una legalización a nivel nacional, ya que estas uniones son permitidas solamente en 12 estados.
El Supremo propinó un “golpe frontal” a la definición del matrimonio como la “unión entre un hombre y una mujer” contenida en la Ley DOMA de 1996 y se mostró más “técnico” en una segunda decisión sobre la legalidad del matrimonio gay en California, según los expertos.
Aunque tenía un abanico de opciones, que podrían haber incluido la legalización del matrimonio gay en los 30 estados que lo prohíben expresamente, el Supremo fue cauto y abrió la puerta únicamente a su reanudación en California.
Su decisión deja el debate en manos de los estados, que deben decidir uno por uno si cambian sus políticas sobre el matrimonio gay y se suman a los doce estados donde esas uniones ya son legales.
“Puede llevar muchos años cambiar esas políticas estado por estado; sólo el Tribunal Supremo puede atajar ese proceso. Por ahora, los jueces no están dispuestos a ello”, dijo el columnista del Washington Post Dan Balz.
“Pero eso no significa que, en unos años, a medida que se presenten más retos ante estos jueces o un tribunal de composición diferente, no vaya a haber un cambio en la postura de la corte. Las luchas por los derechos casi nunca se resuelve en un solo golpe judicial”, apuntó Balz.
Laurence H. Tribe, profesor de derecho constitucional en la Universidad de Harvard, coincidió en que las dos decisiones “dejan en manos del proceso político las cuestiones más polémicas sobre el matrimonio gay”.
Las decisiones “posponen para otro momento, cuando haya avanzado más la ola generacional que está impulsando esta cuestión hacia una conclusión inevitable, el próximo encuentro del Tribunal con las cuestiones de igualdad de libertades y dignidad que se encuentran en el núcleo” del debate, escribió Tribe en el blog del Supremo.
El grupo de defensa de los derechos de los gay Freedom To Marry admitió çque queda mucho trabajo que hacer en cada estado hasta que “quede claro para todos, incluido el Supremo, que es simplemente insostenible que Estados Unidos esté dividido”.
“Nuestra estrategia siempre ha sido ganar un número considerable de estados y de apoyo público para que juntos creen el clima que permita al Supremo llevar al país a una resolución nacional”, indicó el fundador de la organización, Evan Wolfson, al Wall Street Journal.
Para Wolfson, el rápido cambio de la opinión pública sobre el asunto es una garantía de que no habrá que esperar demasiado para que el Supremo vuelva a analizar el asunto. “Es cuestión de años, no décadas”, aseguró.
Mientras, los oponentes del matrimonio gay seguirán defendiendo su causa en los tribunales estatales e impulsando más vetos en las Constituciones estatales, empezando por la de Indiana.