Un “ángel” armado en El Bronx
Toda madre piensa que sus hijos son buenos. Eso lo compartimos los padres.
Entendemos que la madre de Shaalvier Douse no es diferente. Ella veía a su hijo de 14 años como “su ángel”. Así lo describió.
Ese “ángel” fue ultimado por un novato policía el domingo en El Bronx. Eran las 3 de la madrugada del mismo día que el primer presidente estadounidense negro celebraba sus 52 años.
El “ángel” de Shanise Farrar, de acuerdo al NYPD, estaba armado cuando el dúo de policías ordenó que soltara el arma de fuego con la cual le había estado disparando a un joven de 15 años a quien perseguía.
Los detalles del horrífico desenlace aún están siendo investigados. Lo que aparenta ser abundantemente claro está siendo tildado por algunos como uso excesivo por parte del policía que le disparó.
Lo siento por los que ignoran los detalles para emprender acusaciones contra los que a veces se comportan como bandido vestidos de azul. Esta vez la policía hizo lo que el “ángel” armado se buscó. Lo que hasta ahora es evidente, es que este muchacho tenía afán de ser un criminal más de los que se nos pierden a los vicios de las calles en barrios neoyorquinos. Mi historial de acusar, denunciar y condenar a policías abusadores, corruptos y criminales es conocido.
Sin embargo, en este caso creo que la Policía se protegió a sí misma y a aquellos que pudieron ser víctimas intencionadas o inocentes de este joven delincuente. Claro está que ninguna madre debe pasar por similar situación. A ella le damos el pésame. Comprendo el dolor que le acongoja como madre, pero su hijo no era un “ángel”. De hecho todo lo que ahora se ha ventilado apunta hacia otro nombre.
Bajofuego@eldiariony.com