Cuba le dice sí al profesionalismo
LA HABANA/AP Cuba permitirá que sus deportistas sean contratados por equipos de ligas extranjeras, un paso gigante hacia el profesionalismo en su política deportiva.
El consejo de ministros, encabezado por el presidente Raúl Castro, aprobó en su última reunión que los deportistas pueden ser contratados en el extranjero, siempre y cuando cumplan con “sus compromisos con los equipos nacionales” y paguen impuestos sobre los salarios devengados.
“En el caso de la contratación en el exterior, se tendrá en cuenta que estén presentes en Cuba para las competencias fundamentales del año”, informó el diario oficial ‘Granma’.
Según el reporte, el consejo decidió establecer esta política después de que “se estudiaron experiencias internacionales, incluyendo 10 leyes del deporte de varios países iberoamericanos”.
La posibilidad de que los peloteros cubanos sean contratados por equipos de Grandes Ligas estaría sujeta a las leyes del embargo de Washington contra Cuba, que desde hace 51 años prohíbe casi todas las transacciones comerciales con la isla.
Cuba necesitó un permiso especial del gobierno estadounidense para participar en las tres ediciones del Clásico Mundial de Béisbol (2006, 2009 y 2013) que organiza Grandes Ligas. De igual manera, el regreso de un elenco cubano a la Serie del Caribe está sujeto a la aprobación de Washington.
“Nuestra política no ha cambiado. Los jugadores cubanos tienen que ser autorizados por una licencia de la Oficina para el Control de Activos en el Extranjero para poder jugar en Grandes Ligas”, dijo John Sullivan, portavoz de esa oficina, adscrita al Departamento del Tesoro. “Para ser candidatos, los jugadores tienen que demostrar que tienen una residencia permanente fuera de Cuba”.
“Un cambio en las leyes cubanas no afecta nuestro procedimiento de licencias”, agregó Sullivan.
La nueva regulación estipula que “los premios individuales y colectivos recibidos al ganar competencias internacionales se entregarán por completo” a los atletas, según Granma. Estas ganancias serán sujetas a la nueva ley tributaria implantada en la isla desde hace algunos años y en particular desde que el gobierno de Castro impulsó el trabajo independiente en el país.
“Es una gran oportunidad y creo que es el deseo de todos nosotros, de probarnos en otro béisbol y a la vez regresar a nuestra patria”, afirmó Yulieski Gourriel, estelar tercera base de la selección de Cuba y uno de los peloteros mejor cotizados de la isla en la última década.
“A mí me gustaría probarme, es bueno después de tanto tiempo probarse a otro nivel, en la Liga Mexicana u en otro país, y quién sabe algún día en Grandes Ligas”, agregó Gourriel, de 29 años, y quien señaló que esta medida le daría un nuevo impulso a su carrera. “Mi deseo es elevar el techo y… quedándome aquí es muy difícil”, señaló el toletero, quien cree que la medida podría ayudar a frenar las deserciones.
Hasta la fecha pocos peloteros cubanos han sido contratados en ligas extranjeras. El último fue Alfredo Despaigne, quien se desempeñó en julio y agosto de este año con los Piratas de Campeche, de la Liga Mexicana de Béisbol. A principio de esta década, el pelotero cubano Omar Linares jugó en la liga profesional japonesa, y en la década de 1990 hubo algunos deportistas, sobre todo jugadores de voleibol, en ligas europeas.
En años recientes, numerosos deportistas cubanos principalmente peloteros desertaron para probar suerte en Grandes Ligas, como Yasiel Puig (Dodgers de Los Angeles), Yoenis Céspedes (Atléticos de Oakland), Aroldis Chapman (Rojos de Cincinnati) y José Fernández (Marlins de Miami).
Yasmani Tomás, toletero de 22 años, opinó que si esta medida se hubiese implementado antes, “algunos atletas no se hubieran ido del país”.
“Va a disminuir las salidas”, consideró Tomás.
Tomás, quien jugó el tercer Clásico Mundial en marzo pasado, aseguró que probarse en ligas foráneas “es el sueño de muchos atletas. Me gustaría probarme para ver cuál es el límite de Yasmani, y en Grandes Ligas si en algún momento el país lo permitiera, me gustaría hacer lo mejor posible”.
Además, el gobierno cubano implementó una nueva escala de salarios para los deportistas en Cuba, que establece salarios que varían desde 1.500 pesos (62,5 dólares) mensuales para un medallista olímpico, hasta 450 pesos (18,5 dólares) para un reserva de una preselección nacional.También estipula estímulos mensuales a atletas que van desde 2.500 pesos (104 dólares) para un campeón olímpico, hasta 300 pesos (12,5 dólares) para un campeón centroamericano.En el caso de los peloteros que juegan en el campeonato nacional cubano, recibirán premios adicionales “por resultados”, que irán desde 5.000 pesos (208 dólares) para los que participen en 70% de los juegos, hasta 1.000 pesos (41 dólares) por los líderes individuales de bateo y otras categorías. El equipo campeón será premiado con 65.000 pesos (2.700 dólares).
Las medidas entrarán en efecto para los peloteros en noviembre, cuando inicia la temporada de la liga cubana, y el 1 de enero para el resto de deportistas.
El profesionalismo se erradicó en Cuba en 1961, dos años después del triunfo de la revolución encabezada por el ex presidente Fidel Castro.