Escándalo de Christie puede ayudar a políticos latinos
Los senadores Marco Rubio y Ted Cruz pueden sacar provecho para sus posibles candidaturas para la nominación republicanos en el 2016
Houston — El escándalo que afecta al gobernador de Nueva Jersey Chris Christie podría beneficiar al senador republicano por Florida, Marco Rubio, y su colega ultra-conservador, el senador por Texas, Ted Cruz, si esto frustra sus oportunidades para conseguir la nominación presidencial de su partido en el 2016.
Christie, quien ganó la reelección en noviembre pasado con un 60% de las preferencias y un 51% del voto hispano de ese estado, encabezó varias encuestas de opinión realizadas en los últimos meses que lo mostraban como el líder más fuerte entre los republicanos para enfrentarse a un candidato demócrata en las elecciones presidenciales del 2016.
Esto luego de que apoyara la ley de Igualdad de Matrícula que permite a los estudiantes universitarios indocumentados pagar lo que se considera como gasto estatal por sus estudios.
Pero este jueves el gobernador pidió perdón por un escándalo que amenaza seriamente su carrera. Correos electrónicos difundidos a la prensa, sugieren que funcionarios del gobierno de Christie conspiraron para crear embotellamientos de tráfico en septiembre pasado y castigar con eso al alcalde demócrata de Fort Lee por no apoyar la campaña del gobernador.
Christie negó haber estado al tanto de la situación.
“Si él está diciendo la verdad y no emerge nada más en las próximas semanas que lo contradiga, continúa siendo un candidato viable, especialmente en la elección general”, aseguró el analista del Instituto Brookings Thomas Mann.
El partido demócrata no parece dispuesto a dejar intacta la imagen política de Christie. “Por dos horas el gobernador se hizo la víctima en su conferencia de prensa. Según él lo sucedido no es un reflejo de la cultura de su oficina. Pero la realidad es que Christie no es la víctima. Los que sufrieron son los ciudadanos de Nueva Jersey que confiaron en él y en su administración”, declaró la organización en un comunicado enviado a la prensa.
Analistas como Geoffrey Skelley del Centro para Política de la Universidad de Virginia están seguros que tanto los equipos de Rubio como de Cruz “usarán el escándalo para retratarlo como un matón del estilo de la vieja política de Nueva Jersey”.
“Los peores titulares sobre el escándalo están viniendo de sitios conservadores que estaban buscando una excusa para herirlo. Si obligan a Christie a salir, eso ayudará a otros candidatos”, aseguró el encuestador John Zogby.
“El problema con Rubio es inmigración porque los conservadores piensan que es un vendido por haber apoyado la reforma migratoria. Con Cruz, en cambio, su base es el Partido del Té y si Christie pierde apoyo probablemente él no será quien sume sus adherentes”, agregó.
En una reunión con medios hispanos realizada este jueves, Rubio dijo que por ahora tiene tres opciones para el 2016: buscar la reelección en el Senado, postularse a otro cargo o regresar al sector privado. Además, dijo que no está “en el punto de tomar una decisión” al respecto.
Una encuesta realizada en diciembre por CNN/ORC International mostró que un 48% de los votantes registrados apoyaban a Christie como candidato presidencible. El excandidato a vicepresidente republicano Paul Ryan registró un 38%, mientras Cruz sacó 28% y Rubio alcanzó 27%.