Obama se enfocará en la desigualdad social en 2014
La agenda del presidente para este año se enfoca en la desigualdad social y para superarla, prometió usar el poder ejecutivo si se requiere por la falta de colaboración de los republicanos
WASHINGTON.- Consciente de los límites de su presidencia ante el bloqueo republicano, el presidente Barack Obama presentó este martes su agenda para 2014 centrada en la desigualdad social, pero amenazó con actuar en solitario si el Congreso le da la espalda.
Llegó a la presidencia con promesas de cambio pero, en su quinto discurso sobre el “Estado de la Unión”, Obama pidió la colaboración de los republicanos para fortalecer la economía y la clase media, a la vez que amenazó con medidas unilaterales.
“EEUU no se queda inmóvil y yo tampoco. Así es que, donde pueda y cuando pueda, puedo tomar pasos sin una legislación para expandir la oportunidad para más familias estadounidenses, y eso es lo que haré”, advirtió Obama, quien de inmediato fue atacado punto por punto por la bancada republicana.
Al iniciar una nueva fase para revitalizar su presidencia, Obama repitió algunas promesas incumplidas de años anteriores –como la reforma migratoria o el cierre del penal en Guantánamo- y presentó una serie de ideas a favor del ascenso social y la recuperación económica, tema que dominará las elecciones de noviembre próximo.
El discurso de una hora solo incluyó una breve mención a la reforma migratoria como urgencia económica y no hubo anuncios para un alivio migratorio, como vienen exigiendo grupos pro-reforma.
Horas antes, la Casa Blanca insistió en que la pelota está en el techo de los republicanos de la Cámara de Representantes y, según subrayó una funcionaria de alto rango, “allí es donde yace la solución“ al maltrecho sistema migratorio.
María Torres, una “soñadora” de Illinois invitada al discurso, dijo que no llegó a Washington con “grandes expectativas” pero que activistas como ella “vamos a seguir luchando hasta conseguir la reforma migratoria”.
En señal de la polarización del país, los grupos conservadores atacaron el discurso y los progresistas lo elogiaron.
Vanesa Cárdenas, analista del Centro para el Progreso Estadounidense, consideró que ideas como inversión en la infraestructura y un aumento al salario mínimo, “tendrán un gran impacto en la comunidad latina debido a su situación económica actual”.
Cárdenas avaló la idea de que el Congreso debe actuar sobre la reforma migratoria porque “el público estadounidense está perdiendo la paciencia… los ojos están puestos en los principios” que presentarán esta semana los republicanos de la Cámara Baja.
Pero Alfonso Aguilar, director ejecutivo de la Alianza Latina para Principios Conservadores, consideró que el discurso estuvo manido, “carente de detalles” y repleto de ideas económicas que “adora su base”.
Aguilar criticó que, salvo en el área de inmigración, Obama mantuvo un “tono confrontacional” al amenazar con medidas unilaterales en varios asuntos.
Las propuestas de Obama, quien afronta una caída de popularidad, fueron calificadas como “moderadas” por buena parte de los analistas.
Obama dijo que emitirá una orden ejecutiva para aumentar el salario mínimo federal de $7,25 a $10,10 la hora, una medida también atacada por los republicanos pero que beneficiaría a empleados de contratistas federales, como trabajadores de limpieza y mantenimiento o de construcción.
Obama defendió su récord en la economía, política exterior, la reducción del déficit y la reforma sanitaria, pero la oposición republicana no le dio tregua.
La oficina del presidente de la Cámara Baja, el republicano John Boehner, respondió a cada punto delineado por Obama con “hechos” que, a su juicio, demuestran el fracaso de sus políticas.
Obama emprenderá este miércoles una gira nacional para continuar vendiendo su agenda progresista.