Un asunto de confianza
Los republicanos dicen ahora que no van a aprobar una reforma migratoria este año porque no confian en el presidente Obama. ¡Bienvenidos al club!
El senador Charles Schumer (D-NY), defendió al presidente Obama mencionando su tremenda labor en haber deportado a un número record de personas. Luego dijo que a su parecer, está bien si el Congreso aprueba una reforma este año aunque no tome efecto hasta 2016. Es decir, el senador estaría perfectamente feliz y contento con que el gobierno siga deportando gente durante dos años más. Con amigos como Schumer y Obama, ¿para qué necesitamos enemigos? ¿A quién deben rendir cuentas el presidente Obama y los demócratas? ¿Acaso no les importa que ganaron las elecciones con 71% del voto latino?, dándoles el margen de victoria en distritos claves en el país entero. ¿Acaso no merecemos el respeto de que cumplan con lo prometido?
Obama prometió conseguir la aprobación de una reforma migratoria en los primeros 100 días de su presidencia. Prometió que iba a poner fin a la práctica inmoral de separar a los niños de sus madres y padres.
Prometió renegociar al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), reconociendo que tanto trabajadores norteamericanos como campesinos mexicanos estaban perdiendo sus puestos de trabajoy eso fue uno de los motivos principales que han impulsado a tanto indocumentado de viajar al norte en búsqueda de empleos. Prometió a los jefes de estado de todos los países latinoamericanos que los iba a tratar respetuosamente como sus iguales, y que ya el gobierno estadounidense no iba a apoyar a los golpes de estado para derrumbar a nuestros gobiernos.
Prometió hacer algo para bregar con el mercado de narcóticos en los Estados Unidos, que causa tanta violencia en América Latina. Prometió un plan de salud universal, para todos, pero quedan excluidos de este plan millones de indocumentados. Nosotros tenemos problemas de confianza con el presidente Obama.
Ahora los republicanos de la ultraderecha han prometido votar en contra de cualquier proyecto de ley que el presidente respalde, diciendo abiertamente que su prioridad número uno es de hacer ineficaz la gestión de este presidente. Pero cuando estos mismos republicanos derechistas dicen que tienen problemas de “confianza” con el presidente, él y Schumer hacen todo lo posible para apaciguarlos.
En otras palabras ellos están diciendo, “vamos postergar la legalización por dos años más. Vamos a seguir deportando seres humanos a una marcha más rápida que cualquier otro presidente en la historia para que la oposición republicana nos tenga confianza”. ¡Qué absurdo!
Estimado Presidente Obama: Utilice su autoridad ejecutiva, aquella autoridad que le hemos dado con nuestros votos para ofrecer los mismos aplazamientos y permisos de trabajo que ya otorgó a los “soñadores”, para sus padres y madres y los padres y las madres de los ciudadanos estadounidenses. Hágalo ahora. Los republicanos dicen que no van a permitir que se apruebe una reforma migratoria este año. No hay porque esperar más.
¡Alto a las deportaciones! ¡Otorgue los aplazamientos y permisos de trabajar a nuestra gente! Usted dispone de toda la autoridad de hacerlo. El Senado de los Estados Unidos lo apoyará.
Apenas la semana pasada, usted prometió que, si el Congreso no actuaba, utilizaría sus poderes ejecutivos. ¿No le parece correcto incluir en aquella promesa a la gente que le confiaron suficientemente como para elegirlo una segunda vez?