Oscar Pistorius pide perdón por el fallecimiento de su novia
Una vez que el juez apreció cansancio en Pistorius durante su primera intervención en el juzgado, decidió finalizar esta sesión a la espera de continuar en los próximos días con su declaración.
México.- El atleta sudafricano Oscar Pistorius, por primera vez en su juicio, se sentó en la silla de los testigos y con voz alta pidió perdón a la madre de la que fuera su novia, Reeva Steenkamp, asesinada el pasado 14 de febrero de 2013.
Pistorius es investigado por la trágica muerte de Reeva, quien recibió cuatro impactos de bala por parte del deportista en su casa de Pretoria, luego que el sudafricano creyó que se trataba de un ladrón en el cuarto de baño.
Con lágrimas, el atleta paralímpico, quien participó en los pasados Juegos Olímpicos de Londres 2012, se enfrentó a la mamá de la fallecida y señaló que día con día reza por el bien de la familia de su entonces pareja.
“Todas las mañanas cuando me levanto son las primeras personas en las que pienso, por las que rezo“, mencionó Pistorius ante el juez, ante quien admitió que cada noche sufre por no poder conciliar el sueño al recordar el trágico momento.
“Tengo miedo de dormir. Tengo pesadillas terribles, me despierto y siento olor a sangre”, aseveró el primer deportista amputado que participa en Juegos Olímpicos.
Frente al atento juez Thokozile Masipa y con preguntas efectuadas por su abogado Barry Roux, Oscar Pistorius recordó su infancia y cuando le fueron amputadas sus piernas apenas a los dos años de edad.
Platicó que su madre Sheila fue su pilar en sus primeros años de vida, quien siempre le inculcó no darse por vencido y que perdió cuando él tenía 15 años de edad. Y que siempre lamentó la ausencia de su padre Henke, quien en la actualidad ni siquiera ha estado con su hijo en el juicio.
Reconoció que su mamá lo cuidó de buena manera y siempre cubrió la falta del papá, y debido a que vivió en una zona insegura, Sheila tenía una pistola en casa.
Se dijo bendecido y afortunado por tener la oportunidad de dedicarse al deporte, desde pequeño le gustó y más todavía cuando comenzó a ganar medallas de oro. Tras la muerte de su mamá convivió con varios parientes hasta poder hacer una vida normal gracias a su empeño.
Pistorius agregó que este último año ha sido muy difícil, ha estado apegado a la religión y no es para menos, ya que su novia Reeva Steenkamp siempre mostró su cristianismo, oraba en las noches y previo a comer. Además ambos mostraban el amor a sus mascotas.