Cuando la piel se razga

Conoce las causas de las estrías, los tipos y cómo prevenirlas

Los factores involucrados en su aparición tienen que ver con la predisposición genética junto con factores mecánicos y otros como  alteraciones biológicas.

Los factores involucrados en su aparición tienen que ver con la predisposición genética junto con factores mecánicos y otros como alteraciones biológicas. Crédito: shutterstock

Nueva York/EDLP — Las estrías son lesiones producidas como consecuencia de la alteración de las fibras elásticas de la dermis, que se encargan de mantener la elasticidad de lo tejidos de la piel.

Estas lesiones son en realidad la consecuencia del proceso normal de cicatrización de un tejido que sufrió un crecimiento excesivo y rápido y que posteriormente intenta recuperar su anterior ubicación; semeja el desgarro de una tela elastizada por estiramiento.

El tejido elástico de la piel es una fina red de fibras elásticas y colágeno que al estar expuesta a tensión y estiramiento excesivo, pierde su estructura normal y, a poco de producida, comienza con las manifestaciones iniciales con diferentes coloraciones que van desde rosadas, amarronadas y las más antiguas, de aspecto nacarado.

Aparecen con una frecuencia del 25% en la pubertad como consecuencia de cambios hormonales, en un 10 % en los hombres sobre todo cuando se producen aumento rápido de peso, y en mayor frecuencia (75 a 95 %) en la mujer embarazada.

Los factores involucrados en su producción tienen que ver por la predisposición genética junto con factores mecánicos y otros como alteraciones biológicas, los componentes hormono-endocrinos y medicamentos.

Las localizaciones más frecuentes son: en el abdomen, senos, caderas, muslos, glúteos y brazos.

Se las puede clasificar según los mecanismos involucrados, como:

Las que se producen por distensión: son producidas por un descenso brusco de peso.

Las que se producen en la pubertad y que tiene que ver con los cambios corporales y hormonales.

Las del embarazo que se ven frecuentemente en el abdomen, aumenta su frecuencia cuando está asociada a diabetes, embarazo precoz y aumento de peso excesivo.

Hay también una forma atrófica más característica de los deportistas por estiramiento de los tejidos en forma brusca.

Las formas de prevención tienen que ver con un control adecuado del peso, el mantenimiento de actividad física de tipo aeróbica, un adecuado estado de hidratación y el uso de cremas emolientes que permiten la hidratación de la piel.

Fuente: enplenitud.com

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