Acusado de ataque en Bengasi enfrenta pena de muerte
Ahmed Abu Khatallah será presentado ante un juez federal en Washington
El presunto líder del ataque cometido en el 2012 contra el consulado de Estados Unidos en Bengasi, Ahmed Abu Khatallah, ya está en un barco militar rumbo a suelo estadounidense, donde enfrentará la justicia por el atentado que mató al embajador en Libia, Chris Stevens, el encargado de seguridad del Departamento de Estado Sean Smith y dos empleados de la CIA, Tyrone Woods y Glen Doherty.
Una vez en EEUU, Khatallah deberá responder a muchas interrogantes pendientes que hay sobre este ataque, que ya se ha convertido en uno de los temas más calientes de la contienda electoral con miras a los comicios presidenciales del 2016.
Y en lo que se espera sea un juicio muy mediático, ya las autoridades del Departamento de Justicia han indicado que el acusado podría recibir la pena de muerte por uno de los tres cargos que afronta.
En un comunicado divulgado a última hora del martes, el secretario de Justicia de EEUU, Eric Holder, precisó las acusaciones presentadas contra Khatallah, capturado el domingo en una operación conjunta de fuerzas especiales y miembros de la Policía federal (FBI).
“El principal cargo en la acusación es un crimen que podría acarrear la pena de muerte”, señaló el Departamento de Justicia.
Los cargos, presentados el 15 de julio de 2013 y que hasta ahora se mantenían confidenciales, incluyen “matar a una persona en el curso de un ataque a unas instalaciones federales con el uso de un arma de fuego u arma peligrosa, y conspirar para hacerlo”, que es el delito por el que puede aplicarse la pena capital.
Los otros cargos son “intentar proporcionar y conspirar para proporcionar apoyo a terroristas con resultados letales” y “descargar, blandir, usar, transportar y poseer un arma de fuego durante y en relación con un crimen violento”, de acuerdo con el Departamento de Justicia.
En el ataque del 11 de septiembre de 2012 al consulado de Bengasi, en Libia, también fallecieron varios libios.
Holder precisó que, cuando Khatallah llegue a EEUU, será presentado ante un juez federal en Washington, para iniciar el proceso en su contra; y subrayó que podrían añadirse más cargos a los tres ya presentados.
“La investigación continuará para identificar y arrestar a cualquiera de los cómplices” de Khatallah, afirmó Holder.
La detención del sospechoso, cuyo paradero actual no ha sido revelado, se produjo sin un solo disparo, según indicaron a la cadena de televisión CNN funcionarios estadounidenses, que pidieron el anonimato.
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Otros funcionarios aseguraron al diario Washington Post que la captura se produjo en el hogar de Khatallah en Bengasi, desde donde el comando estadounidense lo trasladó a un buque y lo sacó de Libia.
“Estaba aislado, fue una operación limpia”, indicó uno de los funcionarios al Post, que indica que la operación llevaba meses planeada y fue aprobada el viernes por Obama.
La Casa Blanca ha descartado rotundamente el traslado de Khatallah a la prisión de Guantánamo (Cuba), como solicitó el senador Marco Rubio tras conocerse la noticia de la captura.
– Con información de EFE
