Miguel González no canta mal las rancheras
El pitcher mexicano de Orioles abrirá el cuarto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Americana
Pasó seis largos años en las Ligas Menores, pero jamás se rindió. Su meta era llegar a las Grandes Ligas y sentir las emociones de una Serie Mundial. Ahora se encuentra en esa ruta con los Orioles de Baltimore.
Se trata del lanzador derecho mexicano Miguel González, que está señalado para abrir el cuarto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Americana contra los Reales.
Su nombre de pila es Miguel Ángel González Martin, nació un 27 de mayo de 1984 en Pegueros, Tepatitlán de Morelos, un poblado cerca de Guadalajara.
Pero su carrera profesional se desarrolló en el Sur de California cuando su familia decidió mudarse a los Estados Unidos. Miguel tenía 4 años de edad y aún reside en Pacoima, California.
Estudió en la escuela secundaria de San Fernando y luego en Los Angeles Mission College de Sylmar. Creció como fan de los Dodgers siguiendo a su ídolo Fernando Valenzuela.
Fue en ese interín cuando lo reclutaron los Angels de Anaheim en el draft amateur de 2004.
Cuatro años más tarde, los Medias Rojas de Boston se lo llevaron bajo la regla 5 al ser dejado en libertad por los Angels y en 2011 también fue dado de baja al no alcanzar en los planes de los patirrojos.
Los Orioles decidieron echarle un vistazo al pitcher tapatío y lo firmaron como agente libre el 4 de marzo de 2012.
Ahí sacó a relucir sus cuatro herramientas: recta de 92 a 93 millas, sinker, slider y una curva cuya velocidad baja a 84 millas y con ellas tratará de neutralizar a los resurgentes Royals.
Vale apuntar que el camino por las Grandes Ligas no ha sido fácil para González. Tuvo que lidiar con una lesión en la rodilla izquierda en 2008 y al siguiente año perdió toda la temporada tras ser operado con la cirugía Tommy John.
En 2009 recuperó y sacó su fuerza acumulada lanzando para los Águilas de Mexicali en la Liga Mexicana del Pacífico.
De carácter afable y alegre cuando las circunstancias lo requieren, Miguel González, como buen tapatío de origen “no canta mal las rancheras”.
En Baltimore le llaman el “Mariachi” porque en una de las muchas fiestas de caridad que ofrecen los Orioles, González recurrió a otra de sus muchas virtudes: el canto.
Los fanáticos mexicanos y los de Boston y Baltimore han visto a un González implacable en el montículo, pero desconocían que interpretar rancheras, sobre todo las que canta Vicente Fernández, era un arte que tenía escondido.
Fue en la Cena de Gala de los Bigleaguers del año pasado en la que pasó como “espontáneo” al centro del escenario, le colocaron un sombrero de charro y bajo los acordes de un mariachi se “echó” un “palomazo” y no quedó mal.
La gente lo aplaudi de la misma forma como cuando logro uno de sus 111 ponches en la temporada regular.