ALBA cumple 10 años con reto de avanzar en integración económica
La reunión de hoy también conmemoró los 20 años del primer encuentro, en 1994, entre Fidel Castro y Hugo Chávez
La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) cumplió hoy diez años con la vista puesta en avanzar hacia el espacio económico común de un bloque que este domingo sumó dos nuevos socios caribeños y que rindió tributo a Fidel Castro y Hugo Chávez, sus fundadores.
“Hace exactamente una década nació en La Habana la ALBA como resultado de la visión política y voluntad integradora de Fidel y Chávez, artífices de esta época de cambios que hoy protagonizan nuestros pueblos y sus vanguardias políticas”, afirmó el presidente de Cuba, Raúl Castro, el anfitrión de la XIII Cumbre donde la ALBA celebró su décimo aniversario.
Apenas cinco horas duró una cumbre a la que asistieron la mayor parte de los presidentes de la alianza bolivariana, entre ellos el de Venezuela, Nicolás Maduro; el de Bolivia, Evo Morales; Nicaragua, Daniel Ortega, así como los mandatarios de los países caribeños de Antigua y Barbuda, Dominica, Santa Lucía y San Vicente y las Granadinas.
Faltó Rafael Correa, el presidente de Ecuador, quien envió a la cumbre de la ALBA a su vicepresidente, Jorge Glas.
El cónclave bolivariano se saldó con una declaración de 43 puntos en la que no faltaron las adhesiones de solidaridad con Venezuela y Cuba frente a los “intentos desestabilizadores” de Estados Unidos, y las condenas tanto al bloqueo económico a la isla como a las nuevas sanciones contra Caracas aprobadas por el Congreso norteamericano.
“Los países del ALBA no permitirán la utilización de las viejas políticas ya aplicadas en la región dirigidas a propiciar el cambio de régimen político, como ha ocurrido en otras naciones del mundo”, señalaron.
En materia económica, el presidente de Cuba avanzó que, con el espíritu de construir una “nueva arquitectura financiera”, el bloque impulsará una “zona económica complementaria” que integrarán los países de la ALBA, PetroCaribe y Mercosur, un proyecto promovido por Venezuela.
Sobre esta iniciativa, el presidente venezolano, Nicolás Maduro indicó que ese espacio común será una “gran zona económica de cadenas productivas, de comercio justo equilibrado, de inversión y de avances tecnológicos”
El bloque bolivariano ya cuenta con instrumentos como el Tratado de Libre Comercio; el Banco de ALBA, que financia proyectos sociales; o el Sistema Único de Compensación Regional (Sucre), una moneda virtual para las transacciones comerciales entre estos países.
Desde su creación en 2010, se han realizado por este sistema 5,657 operaciones comerciales por un monto que supera los $2,500 millones.
Los países de la ALBA forman parte también de PetroCaribe, alianza que cuenta también con otros países de la región a los que Venezuela suministra petróleo con precios ventajosos, que se ven amenazados por la caída de los precios del petróleo, un asunto del que no se habló en la cumbre de La Habana.
El barril de petróleo en Venezuela se sitúa por debajo de los $60, casi la mitad de su valor hace un año y lejos de los $100 que Maduro dijo esta semana que era su precio justo.
En la cita de este domingo se hizo oficial el ingreso en el bloque de las islas San Cristóbal y Nieves y la Granada, con lo que la alianza pasó de nueve a once miembros.
La cumbre no se cerró con grandes acuerdos, sino que reinó un ambiente de homenajes y palabras de agradecimiento a los padres de la ALBA: el líder cubano Fidel Castro, retirado del poder desde hace ocho años por una enfermedad y ausente en la cumbre, y el fallecido presidente venezolano Hugo Chávez.
La reunión de hoy también conmemoró los 20 años del primer encuentro, en 1994, entre Castro y Chávez, quienes diez años después firmaron en La Habana, el 14 de diciembre de 2004, el tratado constitutivo de esta alianza, a la que después se fueron sumando el resto de países que integran el bloque.
La cumbre sirvió también para repasar los “logros sociales” del bloque, especialmente en materia de salud y educación.
Entre los más destacados por los asistentes figuran el proyecto de alfabetización de la ALBA “Yo sí puedo” que ha beneficiado a unos seis millones de personas en toda la región, mientras que el programa “Operación Milagro” ha devuelto la visión a unos tres millones de personas, según datos aportados durante la cumbre.