Editorial: Una carta vergonzosa
Es inadmisible que se utilice a Israel -y éste se preste a ser usado- e Irán para atacar a Obama
La carta abierta enviada por 47 senadores republicanos al gobierno de Irán es un arrogante intento de socavar la política exterior de Estados Unidos que lleva a cabo la administración Obama. Esto supera los límites de las diferencias políticas que se manejan internamente para llevarlas a un marco internacional e involucrar a otros países.
La meta es impedir el acuerdo que Estados Unidos, junto a cuatro naciones europeas, intentan lograr con Irán para impedir la fabricación de armas nucleares. Este es un proyecto importante para el presidente Barack Obama, lo que es suficiente como para que la oposición republicana lo quiera hacer fracasar como lo ha intentado hacer con las iniciativas surgidas de la Casa Blanca.
Primero fue la invitación del presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, al primer ministro israelí, Benjamin Nethanyahu, para hablar ante el Congreso. Se sabía que Netanhayu se opone a cualquier acuerdo con Irán y el israelí se prestó -también por su propia conveniencia- al juego republicano de torpedear la negociación multipartita con Irán.
Luego el líder del Senado, Mitch McConnell, quiso adelantar una medida bipartirdista exigiendo que el Congreso apruebe cualquier acuerdo con Irán. El deliberado intento partidista de McConnell de llevar a un voto este proyecto, incluso antes de que se firme el acuerdo, hizo que los demócratas participantes retiraran su respaldo.
Finalmente, la mayoría de los senadores republicanos enviaron la carta abierta dirigida la gobierno iraní, explicándole el funcionamiento del sistema constitucional, quitándole importancia a lo que el presidente acuerde, porque a él solo le quedan dos años y mientras que los senadores estarán más tiempo.
La actitud de estos legisladores es vergonzosa e indigna. Es un hazmerreir y una tragedia para un mundo que por lo menos espera coherencia de Estados Unidos. Es inadmisible que se utilice a Israel -y éste se preste a ser usado- e Irán para atacar a Obama. ¿Acaso no se dan cuenta de que son ellos lo que dañan a su país con esta acción?
La prueba a superar de este Congreso es mostrar que tiene lo suficiente para gobernar. La carta es de una inmadurez, irresponsabilidad y arrogancia sorprendente que refleja todo lo contrario.
