Cómo vencer el miedo a gastar
En la medida que no esté plagado de deudas, puede darse algún que otro gustito. La clave está en hacerlo de manera responsable
En nuestro afán por ahorrar dinero para diversos objetivos, es posible que se nos genere un miedo a gastar. Para superar ese temor enfermizo, alinee sus gastos con lo que usted vale.
Es imposible hacer suficiente hincapié en la importancia del ahorro, pero si usted contempla los aspectos básicos, entre ellos, constituir un fondo para emergencias y ahorrar sistemáticamente para la jubilación, gastar dinero en usted de vez en cuando no es un pecado.
En última instancia, el dinero es una herramienta que nos ayuda a hacer cosas y a disfrutar de la vida. No tiene ningún sentido privarse de momentos felices por sentirse paralizado por el temor a gastar.
En la medida que no esté plagado de deudas, puede darse algún que otro gustito. La clave está en hacerlo de manera responsable, elaborando un plan financiero integral e identificando cuáles son las cosas que lo hacen feliz verdaderamente.
Si tiene un miedo irracional a gastar, siga los siguientes pasos:
- Elabore un plan. El mismo debe indicar cuánto dinero gana, cuáles son sus gastos y a cuánto ascienden sus ahorros. Tener en claro cuánto puede gastar puede aliviar el estrés cuando empieza a preocuparse por los costos.
- Identifique sus valores. ¿Qué cosas lo hacen más feliz? El dinero puede generar felicidad si lo usa de manera inteligente. Como regla general, priorice las experiencias por sobre las cosas materiales. Las posesiones materiales tienden a perder el encanto al poco tiempo de adquirirlas, mientras que los recuerdos de un viaje divertido con familiares o amigos perduran durante años.
- Priorice sus gastos. ¿Qué es más importante para usted? Debe priorizar sus gastos para así poder disfrutar plenamente de sus ingresos discrecionales.
Por ejemplo, si su prioridad es irse de vacaciones con sus amigos de toda la vida, puede omitir ese happy hour con sus colegas. Por el contrario, si lo más importante para usted es forjar buenas relaciones laborales, entonces, permítase gastar dinero en eventos que lo acerquen más a su objetivo.
- Diversifique sus ingresos. En ocasiones, usted teme gastar dinero porque le preocupan los escenarios hipotéticos. Enfrente el miedo a la escasez o la inestabilidad generando ingresos adicionales. Si llega a perder su fuente de ingresos principal, aún dispondrá de un dinero que lo ayudará a superar un momento difícil.
Comience haciendo trabajos menores, por ejemplo, vender la ropa que ya no usa por eBay. Si aún le queda tiempo, busque un trabajo fijo de jornada parcial, por ejemplo, redacte artículos en forma independiente o corte céspedes.
- Invierta su tiempo. Si no puede pensar en algo en lo que le gustaría gastar su dinero, quizá el problema no sea el dinero.
Piense en una causa que signifique mucho para usted y ponga su tiempo y sus habilidades a disposición de la misma. Por ejemplo, la mayoría de los refugios de animales necesitan voluntarios que saquen a pasear a los perros o limpien las instalaciones. También puede haber otras causas que necesiten de su ayuda para recaudar fondos. Esté abierto a cualquier actividad que le pidan que realice.
En algunas ocasiones, las cosas que lo hacen feliz cuestan muy poco dinero, mientras que en otras, debe gastar más para concretar sus objetivos. Al determinar qué es importante para usted, podrá disfrutar de la vida sin desatender su futuro.