Una oda al amor por Ecuador en el condado de Queens
Cientos de personas se dieron cita en el evento donde dominó el amarillo y la bandera tricolor

Manuel Orellana y María Saldaña junto a sus hijos Christopher (6), Justin (9), Linda (7) y Bella (4) disfrutaron del desfile. Crédito: Andrea González-Ramírez | El Diario
NUEVA YORK – Ecuatorianos de todas partes de la ciudad e incluso, de otros estados, se dieron cita hoy en Queens para celebrar el trigésimo tercer aniversario del Desfile Ecuatoriano en Nueva York.
Con el contorno de Manhattan de fondo, la comunidad marchó desde la calle 61 hasta la calle 86 del Northern Boulevard en un desfile multitudinario donde dominó el amarillo y la bandera tricolor.

“Estoy muy emocionado”, dijo Ángel Llangare, quien como todos los años viajó para celebrar el desfile desde su hogar en Brooklyn junto a miembros de su banda Marcelo y Su Grupo Kandela. “Una vez al año podemos venir y demostrar lo que es nuestro país”.
Al ritmo de la música y de la consigna “¡Que viva Ecuador! ¡Que viva, que viva!”, desfilaron funcionarios tales como la presidenta del condado de Queens, Melinda Kantz; el senador José Peralta; el asambleísta estatal de origen ecuatoriano Francisco Moya y el alcalde de la ciudad Bill de Blasio, quien hasta lució el tradicional sombrero de paja toquilla.

También participaron Diego Benítez, presidente de la Fundación Vista Para Todos quien fungió como el Gran Mariscal Internacional; el presentador de televisión, Danilo Carrera; la Reina del Comité Cívico 2015-2016, Emely Matute; Miss Ecuador 2015, Francesca Cipriani; la Reina de Quito 2014-2015, Carolina Báez; la Reina de Guayaquil 2014-2015, Andrea Torres, entre otras personalidades ecuatorianas.
Desde Stanford, Connecticut, la guayaquileña Matilde Cevallos y su familia viajaron a Queens con una gran bandera del Ecuador que llamaba la atención por ser quizás la más grande en todo el desfile.
“Soy ecuatoriana 100%”, dijo Cevallos que lleva 45 años radicada en Estados Unidos. “Nosotros vamos con nuestra bandera a todos lados¨.

El candente sol del verano no se podía comparar con a calidez humana y la alegría del pueblo ecuatoriano, ambas características que reinaron en el desfile.
“Es nuestra primera vez aquí”, dijo el joven Pablo Brito, acompañado por su esposa Janet Yanza y el pequeño bebé de ambos, Eric Paul. “Es algo bien bonito”.
Para la pareja de Long Island, acompañados por su familia, la emoción era visible al verse rodeados por sus hermanos ecuatorianos y con su hijo en brazos representando a una nueva generación.

Y es que para todos los presentes, el desfile fue una oda al amor por su patria.