Republicanos, divididos entre la seguridad y compasión con refugiados sirios
Conservadores moderados piden mesura en debate sobre programa de refugiados
Washington.- Ya preocupados por la imagen anti-inmigrante de su partido y su impacto electoral, varios conservadores criticaron este miércoles la idea de prohibir la entrada de refugiados sirios a EEUU, convencidos de que la seguridad no está reñida con la compasión hacia los migrantes.
EEUU ha aceptado a menos de 2,200 refugiados sirios desde 2011, y las afirmaciones del gobierno de que el proceso de admisión es “riguroso” –toma un promedio de dos años- no aplacan a buena parte de los conservadores en el Congreso y en la contienda electoral.
Voces moderadas
Sin embargo, conservadores de corte moderado aseguraron hoy a este diario que si bien les preocupa que terroristas puedan colarse por las fronteras de EEUU, los ataques de París el viernes pasado no deben justificar la xenofobia.
“Esto no le vaya a ayudar a los republicanos en los comicios generales y la respuesta debe ser más razonada, porque va alejar no sólo a los votantes que se preocupan por el tema de inmigración, como los hispanos y demás minorías, sino también a votantes del centro que creen que los republicanos pueden ser extremos”, dijo hoy a este diario Alfonso Aguilar, presidente de la “Alianza Latina para Principios Conservadores” (LPCP, en inglés).
“Nos preocupa la seguridad y la Administración Obama no está haciendo lo suficiente para apaciguar a la gente sobre el manejo adecuado de las amenazas terroristas. Creo que es más conveniente proponer medidas para que el gobierno fortalezca el proceso de revisión de refugiados; no basta con que el gobierno diga que ´el sistema que tenemos está bien´”, enfatizó.
Por su parte, el reverendo Samuel Rodríguez, presidente de la Conferencia Nacional de Liderazgo Cristiano Hispano (NHCLC, en inglés), insistió en que EEUU “tiene la experiencia tecnológica y de seguridad, además de recursos, para conciliar la seguridad de los ciudadanos con la aceptación compasiva de quienes huyen de la destrucción”.
“Podemos y debemos proteger a nuestros ciudadanos y salvar a vidas inocentes. No puede ser una propuesta de todo o nada, se pueden hacer ambas cosas”, afirmó Rodríguez.
Mientras, Alex Nowrasteh, analista de política migratoria del conservador Instituto Cato, recordó en un blog que, de los 859,629 refugiados admitidos a EEUU desde 2001, sólo tres han sido condenados por intentar planear atentados en el exterior sin poder lograrlos.
“Cerca de uno de cada 22,541 estadounidenses ha cometido homicidios en 2014. La amenaza terrorista de los refugiados sirios en EEUU es una tremendísima exageración, y tenemos poco que temer de ellos, porque el sistema de revisión de refugiados es exhaustivo”, aseguró.
Refugiados como arma electoral
Pero lejos ha quedado la compasión de algunos republicanos ante las imágenes del niño sirio, Alyan Kudi, que se ahogó en la isla griega de Kos mientras intentaba huir con su familia hacia Europa.
El magnate empresarial y precandidato presidencial republicano, Donald Trump, sugirió anoche en un programa de Fox News que EEUU debe cerrar algunas mezquitas para contener la amenaza terrorista, y repitió su advertencia de que algunos podrían hacerse pasar por refugiados para cometer atentados como los de París.
Su más próximo rival, el neurocirujano Ben Carson, apoya eliminar fondos para el programa de refugiados y ha pedido una mayor vigilancia de los musulmanes, mientras continúa atacando “la corrección política” en el país.
El exgobernador de Florida, Jeb Bush, no se opone a la llegada de refugiados aunque sí ha recomendado cautela, y en discurso ante un colegio militar en Carolina del Sur dijo hoy que EEUU tendrá que tener una mayor presencia de tropas sobre el terreno para combatir a ISIS
Otro precandidato, el senador por Carolina del Sur, Lindsey Graham, antes apoyaba a los refugiados sirios y ahora dice que es mejor frenarlos.
Pero Aguilar aún recuerda la amarga derrota republicana en 2012, cuando Mitt Romney recetó la “autodeportación” de los indocumentados y perdió las presidenciales por el rechazo de los votantes hispanos.
Batalla en el Congreso
Hasta ahora, 31 gobiernos estatales –todos menos uno bajo control republicano- y los principales líderes republicanos del Congreso se oponen a la llegada de 10,000 refugiados sirios en los próximos doce meses, dentro del tope de 85,000 que fijó la Administración Obama para el año fiscal 2016.
El subcomité de Inmigración y Seguridad Fronteriza de la Cámara Baja realizará una audiencia mañana jueves, con miembros de alto rango de la Administración Obama, sobre la crisis en Siria y su impacto en el programa de reasentamiento de refugiados de EEUU.
El presidente del Comité Judicial de la Cámara Baja, Bob Goodlatte, señaló que el grupo extremista islámico ISIS ha dicho que usará el sistema de refugiados para infiltrarse en países de Occiente y, a su juicio, EEUU no tiene los recursos para investigar a cada refugiado.
“La mejor manera de frenar esta crisis de refugiados es promover la paz en la región y apoyar operaciones humanitarias…en vez de traer más y más personas a EEUU”, recetó Goodlatte.
¿Otro cierre del gobierno?
El Congreso debe aprobar la extensión del presupuesto antes del próximo 11 de diciembre si quiere evitar el cierre del gobierno, pero algunos republicanos han sugerido condicionarlo a que se prohíba la entrada de refugiados.
Será la primera gran prueba de fuego del presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, quien ha pedido un voto de una medida esta semana para exigir un proceso que “certifique” que los refugiados no son una amenaza a la seguridad.
Pero no está claro que la medida sea aprobada en el Senado, donde los demócratas tienen suficientes votos para bloquearla, además de que afrontaría un veto del presidente Barack Obama, quien ha dicho que rechazar a refugiados contraviene los valores de EEUU.
Memoria histórica
Para grupos como el Centro para el Progreso Estadounidense (CAP, en inglés), los estadounidenses no deben olvidar el origen del programa de reasentamiento de refugiados.
Es que la convención de refugiados de 1951 respondió al fracaso de la comunidad internacional de proteger a las víctimas de la persecución nazi.
Las políticas de EEUU sobre refugiados tomaron en cuenta el incidente con el buque alemán “MS St. Louis” que, con 937 judíos a bordo, no pudo atracar en Cuba ni en las costas de Miami, por apatía de los respectivos gobiernos.
El buque fue regresado a Europa en 1939, y cerca de un tercio de sus pasajeros fueron asesinados en Auschwitz y otros campos de concentración durante el Holocausto, recordó CAP.