Central de transporte del WTC abrirá en marzo
Originalmente, el diseño de Calatrava preveía un techo móvil que permitía abrir hacia el cielo las "alas" que coronan la estación
NUEVA YORK — La estación diseñada por el arquitecto español Santiago Calatrava en el nuevo World Trade Center de Nueva York será inaugurada oficialmente a comienzos de marzo, según anunciaron el martes las autoridades locales.
El edificio, coronado por una emblemática cúpula de metal y vidrio, es una de las piezas centrales de la reconstrucción de la llamada “zona cero” tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.
La estación culmina un gran nudo de comunicaciones en el bajo Manhattan y servirá para conectar varias líneas de tren, metro y barcos y grandes edificios del distrito financiero.
“Hace más de una década, los planificadores imaginaron un renovado complejo de transportes en el World Trade Center que permitiese conexiones clave entre varios modos de transporte por primera vez. Este año, esa visión se hará realidad”, dijo hoy en un comunicado el presidente de la Autoridad del Puerto de Nueva York y Nueva Jersey, John Degnan.
La institución, que gestiona la reconstrucción de la “zona cero”, destacó que la nueva estación facilitará inmediatamente los viajes a más de 100.000 personas que usan cada día los trenes de cercanías que conectan Nueva Jersey con Manhattan.
Una vez completada, la instalación será utilizada por más de 250.000 pasajeros al día y visitada por millones de turistas cada año, según la Autoridad del Puerto, que dará espacio allí a tiendas y restaurantes.
“Será un vibrante centro de tránsito y un destino turístico con una gran red de transportes en el revitalizado Bajo Manhattan”, señaló en la nota el director ejecutivo, Pat Foye.
Algunas partes de la estación están ya abiertas para facilitar el tránsito de viajeros tras años de retrasos en las obras de un proyecto que se presentó en 2004 y que inicialmente quería completarse para 2009.
Originalmente, el diseño de Calatrava preveía un techo móvil que permitía abrir hacia el cielo las “alas” que coronan la estación, una opción que finalmente se abandonó para reducir gastos tras numerosos sobrecostes.
En total, la construcción del edificio costará cerca de 4,000 millones de dólares, casi el doble de lo previsto inicialmente.