Contraloría recobra $364,000 en salarios impagos a trabajadores
Una compañía que tenía un contrato con la Ciudad engaño a 24 empleados, todos inmigrantes y que casi no hablan inglés
El contralor municipal Scott Stringer anunció ayer que la Oficina de Derecho Laboral de la Contraloría llegó a un acuerdo con la empresa Beacon Restoration Inc., para que restituya $364,000 en salarios no pagados a 24 de sus trabajadores, todos inmigrantes hispanos y del Sur de Asia.
La empresa había logrado un contrato de la Ciudad para instalar un nuevo techo en la Planta de Control de la Contaminación del Agua en Port Richmond, en Staten Island, en el 2010 y 2011.
“Beacon Restoration se aprovechó de sus trabajadores para su beneficio financiero y ahora están pagando por sus acciones”, dijo Stringer tras anunciar el acuerdo, que además de los $327,000 en salarios no pagados, incluye que la empresa cancele $20,000 en intereses y $17,000 en multas civiles.
“Mi oficina no tolerará que contratistas de la Ciudad engañen a los trabajadores con sus salarios y beneficios, algo que se han ganado con todo su derecho”, enfatizó el Contralor.
La investigación del caso comenzó en junio de 2011 después que el Departamento de Protección Ambiental (DEP), recibiera una queja de un trabajador por falta de pago, lo cual pudo ser verificado cuando se determinó que habían irregularidades en los registros de nómina de la empresa.
El DEP refirió el caso a la oficina del Controlador para que continuaran la investigación. Unos meses después, Volmar Construction Inc., uno de los principales contratistas en el proyecto, y Beacon Restoration Inc., hicieron que muchos de sus trabajadores, la mayoría que no hablan inglés, firmaran formas en las que afirmaban falsamente que les habían pagado en su totalidad.
“Yo no sabía que me debían porque siempre me estaban pagando”, dijo el trabajador ecuatoriano Segundo Autacama, quien no se dio cuenta hasta que uno de sus compañeros le dijo que en los trabajos para la Ciudad, los empleadores están obligados a pagar tasas más altas que lo usual.
La oficina del Controlador continuó su investigación a pesar de estas formas y encontraron irregularidades. Mientras que los registros de pago decían que en ciertos días se pagaba $64 la hora, se encontró que la compañía atrasaba los pagos y al final de la instalación acabaron pagando a sus trabajadores de $140 a $180 al día -mucho menos de lo que mostraban los registros manipulados.
“Estos 24 trabajadores merecen ser pagados por el trabajo que hicieron para que puedan vivir, trabajar y criar una familia aquí, al igual que todos”, dijo Stringer, agregando: “Mi mensaje hoy es el siguiente: pagar salarios prevalecientes no es una opción, es la ley. Si usted cree que puede haber sido engañado mientras trabajaba en un proyecto de obras públicas financiado por la Ciudad, sepa que mi oficina te respaldará”.
El acuerdo además prohíbe que Beacon Restoration y su dueño trabajen en obras públicas en el estado de Nueva York por los próximos cinco años.