Demandan a empresa por negligencia contra prisioneros
Al menos 12 presos murieron desde que Armor, la empresa implicada empezó a operar en el condado de Nassau
Una empresa contratada para proveer servicios de salud a los presos en el sistema correccional del condado de Nassau, Long Island, deberá comparecer ante la justicia en el marco de una demanda que la acusa de negligencia.
De acuerdo con los documentos de la demanda presentada por la oficina del Fiscal General del Estado, se trata de la empresa Armor Correctional Health Medical Services (Armor). Al menos 12 internos han muerto desde que empezó a operar en 2011, entre ellos 4 en lo que va del 2016.
El presente caso es apenas una arista de los recurrentes problemas dentro del sistema penitenciario del país. Según datos del Center for Research on Globalization, en Estados Unidos hay sobre 2,3 millones de personas en las cárceles, de los cuales, el setenta por ciento son negros e hispanos.
El Fiscal General Eric Schneiderman anunció ayer el proceso legal contra Armor por supuestamente no proporcionar servicios médicos adecuados a los presos como es requerido por su contrato con el Centro Correccional del Condado de Nassau (NCCC).
La demanda radicada en el Tribunal Supremo de Nueva York, alega que Armor, que presta servicios de salud en las cárceles con sede en Florida, a través de su contrato anual por $11 millones con el condado de Nassau, o bien proveyó un tratamiento inferior o no cumplió con muchas de sus obligaciones.
“Los reclusos dependen de las empresas que prestan servicios de salud para una amplia gama de problemas médicos, muchos de los cuales no fueron tratados. Las personas que luchan con enfermedades crónicas, problemas de salud mental y de abuso de sustancias merecen atención de salud completa, fiable y de alta calidad”, dijo Schneiderman.
A través de un comunicado, el Fiscal General subrayó que no proporcionar servicios de salud adecuados según se requiera es completamente inaceptable. Agregó además que descuidar el deber de proporcionar atención adecuada a los prisioneros, no sólo defrauda a los contribuyentes, sino que además pone en riesgo la salud y la seguridad de los internos, con consecuencias potencialmente mortales.
La demanda detalla que Armor no cumplió con numerosos estándares de rendimiento requeridos en virtud del contrato, y sin embargo, en repetidas ocasiones facturó al condado de Nassau en su totalidad por los servicios prestados.
De acuerdo a la oficina del Fiscal General, esta conducta constituye facturación falsa y fraudulenta bajo la Ley Reclamo Falsos de Nueva York, así como las prácticas comerciales ilegales y engañosas en virtud de la Ley Ejecutiva 63.
En uno de los considerandos más contundentes, se argumenta que, el hecho de que el incumplimiento de Armor de no proporcionar una atención médica adecuada pudo afectar dramáticamente las condiciones médicas de los internos.
La Comisión de Correccionales del Estado de Nueva York determinó que de los doce internos que han muerto en el NCCC desde que esta compañía comenzó a proporcionar servicios, cinco murieron porque no recibieron atención médica adecuada.
La acusación destaca finalmente que aunque se requirió que Armor hiciera correctivos y una serie de evaluaciones sobre los servicios que ofrecía, se demostró que no hizo tales correctivos, en tal virtud, la demanda busca garantizar que Armor cumpla plenamente con sus obligaciones en razón del contrato y pague por los daños al condado.
Entre las medidas punitivas sugeridas por el Fiscal General se incluyen designar un monitor independiente para supervisar el cumplimiento continuo del contrato y prohibir permanentemente a Armor hacer ofertas para los futuros contratos de servicios de salud en el estado de Nueva York.