Piden ayuda para sepelio de dominicanos muertos en accidente
Dos hermanos adultos y un menor de 10 años fallecieron en una carretera de Long Island, y al dolor se suma la falta de fondos para sepultarlos
El pasado domingo una familia dominicana sufrió la pérdida de tres de sus miembros tras un fatal accidente en una carretera de Long Island, y a la tristeza de lo ocurrido ahora se suma que no tienen cómo pagar los gastos del sepelio.
Carmelo Pinales, de 26 años, perdió el control de su vehículo, un Subaru, cuando se dirigía el domingo a un parque acuático para festejar el cumpleaños número 10 de su hijo Christopher, en compañía de su hermana y dos familiares más.
En el accidente, que involucró a otros dos autos, perdieron la vida el menor, su padre y la hermana de éste, Patricia Pinales, de 27 años. El accidente dejó a otras tres personas muertas, entre ellos Scott Martella, de 29 años, un antiguo colaborador del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo y actual vocero del condado de Suffolk, Isidore Adelson de 81 años y si esposa, Helen, quien falleció ayer.
Para ayudar a la familia dominicana con los gastos fúnebres, parientes y amigos están promoviendo una campaña de recolección de fondos para reunir $50,000.
Ivonne Luque, novia de Carmelo, manifestó su dolor y le hizo un llamado a la gente para que los apoye con cualquier donación a través de la página web:
https://www.gofundme.com/2tcuwd98.
“La Familia Pinales y sus amistades están pasando un momento muy delicado ya que hemos perdido a tres miembros: Carmelo Pinales, Patricia Pinales y Christopher Pinales. Como son tres pérdidas necesitamos ayuda de toda la comunidad y de la gente que es cercana a ellos y a su familia”, dijo. “Si podemos ser tan generosos y considerados de ayudar a esta causa se les agradece de corazón por cualquier ayuda que puedan aportar”.
La mujer agregó que su pareja había traído a su hijo de República Dominicana hace poco tiempo y que recientemente se había retirado de uno de sus trabajos para dedicarle los domingos al niño.
“Era un excelente padre, también un buen hijo y buen amigo que mucha gente quiso por su gran nobleza. Prefería mil veces quedarse sin nada con que comer por ayudar al que más lo necesitaba”, comentó, invadida por la tristeza.
Antero Pinales, padre y abuelo de las víctimas, aseguró que no sabe cómo va a poder superar ese dolor y recordó que el pasado 15 de julio recién habían celebrado en familia el cumpleaños número 26 de su hijo.
Rigoberto Valerio, amigo de la familia, también lamentó el hecho y recordó al dominicano como un hombre alegre.
“Que tristeza siento al enterarme de una tragedia que le arrancó la vida a un amigo, una persona de un alma noble que fue el primer amigo que hice al visitar Estados Unidos”, dijo. “Siempre recordaré su sonrisa cuando le decíamos: ‘que lo qué ta pasando Carmelo’. Su sinceridad y su honestidad”.
Winifer García, de 21 años y una menor de 3 años que también viajaban en el auto conducido por Pinales se recuperan satisfactoriamente el hospital, al igual que los cuatro pasajeros que viajaban en un BMW que fue el tercer auto involucrado en el accidente.
Las autoridades de Suffolk aseguraron que siguen investigando si el accidente fue provocado por exceso de velocidad y pidió a la comunidad y los testigos del hecho que tengan alguna información, suministrarla llamando a la línea (631) 852-8752.
Por su parte el cónsul de República Dominicana en Nueva York, Eduardo Selman, pidió a las autoridades que pronto logren esclarecer las razones que ocasionaron el terrible accidente.
“Lamentamos la tragedia automovilística ocurrida en la autopista de Long Island Expressway el día de ayer, en la que perdieron la vida cinco personas y confíamos en las investigaciones que realizan las autoridades competentes para esclarecer las circunstancias de este accidente”, manifestó el cónsul, al tiempo que envió su sentido pésame no solo a los familiares de los dominicanos fallecidos sino también al gobernador Andrew M. Cuomo, por haber perdido en el hecho a su exasistente Scott Martella.
La familia de las víctimas aún no ha decidido si trasladará los cuerpos a República Dominicana o si realizará su sepelio en Hempstead Long Island, donde residían.