Todo un estilo para crear empresas

Codie Sánchez-Baker trabaja en el sector financiero pero, además, ha montado una empresa de estilismo y moda que probablemente no sea su última

A los 21 años Codie Sánchez-Baker empezó a trabajar como reportera. Se acababa de graduar y empezó a publicar historias sobre la frontera y el tráfico de personas. “Temas tristes y oscuros”, explica desde Dallas, donde habla por videoconferencia con este diario.

Escribió varios artículos sobre las personas mayores de las familias que cruzan la frontera. Para ellos, físicamente es imposible por lo que se quedan atrás. Solos y en condiciones dramáticas. Recibió premios importantes por ello y recuerda que una de las mujeres con las que habló le dijo que estaba feliz por su premio porque eso permitiría que la gente se fijara en sus problemas y por fin recibieran la ayuda que necesitaban.

Las esperanzas de aquella anciana desmotivaron a Sánchez.

“Estaba decepcionada porque Kim Kardashian hacía cualquier cosa y todo el mundo miraba pero las cosas de verdad, las que importan, las que están pasando, a nadie parecía preocuparle”, explica.

Nacida hace 30 años en Arizona de padre español y madre estadounidense, explica que en una ocasión fue a una conferencia de mujeres latinas y conoció a una gestora de fondos de Vanguard. “Ni sabía lo que era un fondo de inversión”, reconoce riéndose de sí misma. Pero en ese momento empezó a entender la correlación del dinero, el poder y el efecto que este tiene sobre los cambios.

“Estaba decepcionada y no estaba haciendo el efecto de cambio que quería. Y me di cuenta que la mejor forma de hacerlo es seguir el dinero, trabajar en finanzas para crear posibilidades y contribuir a la sociedad”. Estudió finanzas y empezó a trabajar en Vanguard en 2007. Tras un año y medio en este fondo terminó en Goldman Sachs.

Sanchez admite que la firma sufría de un fuerte problema de imagen durante la crisis. “Bueno, pienso que no puede haber compañías sin capital, se necesita tener dinero, una estructura financiera”, y de ahí su trabajo en Goldman Sachs, pero reconoce que “estar allí en aquel momento era extraño.

Cuando se casó se fue con su esposo a Dallas y empezó en otra firma de inversión, First Trust. Hoy reporta al presidente y está al mando de un equipo que construyó de la nada para gestionar inversiones en Latinoamérica y mercados emergentes. Unas 20 personas trabajan en ese equipo que está en Colombia, México, Perú…

Pero Sánchez tiene tantas inquietudes como horas tiene el día  y ahora tiene en sus manos otra empresa separada de su trabajo diario.

“Detesto ir de compras y tengo que vestirme bien para ir a trabajar”. Para ella era un problema porque, además, explica que le gusta subcontratar todo lo que puede. “Quiero gestionar mi tiempo de forma eficiente”, explica.

Codie Sanchez, fundadora de threadsrefined.com, dice que le gusta trabajar con personas que le complementan y en las que confía./Cortesía
Codie Sanchez, fundadora de threadsrefined.com, dice que le gusta trabajar con personas que le complementan y en las que confía./Cortesía

Pensando que otras mujeres les ocurre lo mismo y que los de envíos de cajas de ropa no responden a las necesidades de cada una de forma individual pensó en la posibilidad de crear un servicio para gente que no quiere gastar “toneladas de dinero, quiere verse bien y no ir de compras”. Preguntó a cinco o seis personas como ella si pagarían por un estilista con el que trabajaran en un marketplace. Le dijeron que si  y empezó a ponerlo en marcha.

“Empecé con Threads Refined en mayo del año pasado, a los que estaban interesados de verdad les dije, ¿Si? Dame tu tarjeta de crédito”, explica riendo para dar a entender que hay que poner en marcha en serio una idea y probarla, probar precios, ver lo que funciona y lo que no. Ensayar. Lo suyo era contactar a personas con estilistas, con distintos rangos de precios en un método de suscripción y que estos dedicaran horas a sus clientes, la primera en una consulta presencial.

El estilista dirá cuantas horas necesita para lo que se le pida y en vez de cobrar comisión por las ventas  se compra su tiempo por horas.

www.Threadsrefined.com
http://www.Threadsrefined.com

Empecé a hacer negocios antes de lanzarlo. En el libro de Lean Start Up y otros se describe cómo hay que empezar con un producto minimamente viable e insistir e insistir para que funcione. Mucbos empresarios empiezan con mucho dinero de entrada y luego se vienen abajo”, explica.

“El cash flow (el dinero en la caja y disponible) es crucial y hay que hacer algo tan barato como sea posible para empezar. Yo estoy en finanzas y podía haber captado capital, pero no lo hice porque puede empezar con poco dinero”.

Sánchez puso su empresa con capital propio: $5,000 para tener los aspectos legales, contables y la web cubierta. Empezó a funcionar por contactos y contrató a una vendedora “soy de la vieja escuela”. Reclutó a los primeros cuatro estilistas y…. no. No hay un éxito inmediato.

Los primeros meses todo fue lento y con mucho trabajo. “Me tomaba una semana hacer $100 en ventas. Suena ridículo y me preguntaba, ¿pero qué estoy haciendo?”.

Codie Sánchez dice que ha creado una web para mujeres a las que no les gusta ir de compras pero necesitan vestir de forma profesional./Cortesía
Codie Sánchez dice que ha creado una web para mujeres a las que no les gusta ir de compras pero necesitan vestir de forma profesional./Cortesía

En octubre lanzó la empresa y en pocos meses recuperó la inversión. Ahora tiene beneficios, Sánchez trabaja con su madre,  un socio y estilistas en todo el país. Espera triplicar sus ventas este año y ha encontrado una persona que va a dirigir buena parte de la empresa porque “a mi no me gusta ir de compras y no es la mejor  forma de empezar un negocio, haciendo algo que no te gusta. Lo hice porque pensé que había una necesidad en el mercado”. Al crecer se están empezando a enfocar en cosas que Sánchez admite que no disfruta, como ver tendencias de moda.  “Lo que a mi me gusta es mirar hojas de cálculo y planificar estrategias”.

Admite que ha construído el portal alrededor de su imagen porque cree que el servicio demanda una historia que contar y necesita una persona que lo haga. Ha sido ella misma pero prevé dar un paso atrás al frente de la empresa aunque seguirá encargada de su estrategia.

“En el futuro no me veo en las compañías que creo. Me gusta construirlas, saber qué funciona y no es que no quiera estar involucrada pero quiero que otra persona lo gestione. Yo quiero tener la visión, las decisiones estratégicas, echar a andar y pasar al siguiente reto empresarial”.

Sánchez dice que es clave que en su equipo haya gente que cubra sus propias debilidades (“el primer paso y el más duro es conocerse uno mismo y ser honesto con lo que no se es bueno”) y en las que confie. “Se que suena raro pero me gusta trabajar con gente que me de buena energía”.

Las claves de un empresario

  • Tener valores a los que apegarse y que el equipo los siga.
  • Ser más curioso que inteligente.
  • Ser persistente, implacable.
  • Tener pasión en el sentido de disfrutar de lo que uno hace porque el resultado tarde siempre en llegar.

Tres libros importantes

Estos son los títulos que esta empresaria recomienda:

  1. The four hours work week, de Tim Ferris. Ayuda con el cómo se tiene que trabajar, según Sánchez.
  2. Awaken the giant within, de Tony Robbins. “Crea un sistema mental que te ayuda a entender por qué haces lo que estás haciendo”, dice esta empresaria.
  3. Ego is the enemy, de Ryan Holiday. “El mensaje es cómo no echar las cosas a perder, que el éxito te despierte un ego que se ponga en tu camino”, resume.

En esta nota

emprendedores empresarios

Suscribite al boletín de Empleos

¿Te gustaría recibir ofertas de empleo en Los Ángeles?

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias!

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain