Washington entierra el último reducto de privacidad en Internet
El Congreso aprueba revocar la limitación que tenían los proveedores de señal en la Red de compilar y vender datos de usuarios
Si usa un buscador para mirar el último modelo de carro que le gusta cada vez que use el buscador o el browser va a tener un anuncio de ese carro. No de otro. Ya se había dado cuenta ¿Verdad?Empresas como Google o Facebook utilizan los datos de unos usuarios cuya privacidad se convierte en el producto que venden a terceros para hacerles llegar una publicidad que se considera altamente efectiva. Lo es, o lo intenta ser, porque las empresas en Internet conocen cada vez mejor a sus usuarios por el uso que hacen de sus servicios y pueden anticipar si prefieren manejar un SUV o un sedán. Eso si, se pueden borrar las cookies que dan pistas a estas empresas de qué se hace en la red.
Las empresas proveedoras de Internet, es decir, compañías como Verizon, AT&T o Comcast entre otras iban a tener prohibido comercializar los datos de sus usuarios a partir de diciembre sin el permiso explícito de estos. Así lo había dispuesto la Administración de Barack Obama preocupada como estaba por las pocas opciones que existen en el mercado entre los proveedores de este servicio. Muchas de estas empresas operan en duopolio o monopolio, es decir, el consumidor no tiene opción a la hora de contratarlas.
Ahora, esta regulación está a punto de ser revocada, como muchas otras. Las dos cámaras del Congreso, con mayoría republicana, han rechazado esta legislación diciendo que anula la innovación y ahora ya está pendiente de que el presidente Trump lo firme y con ello sea ley.
Y así cae el último reducto de privacidad en Internet
¿Qué datos?
Los proveedores pueden compartir o vender a empresas gestoras de datos la información en el mapa del usuario (geolocalización) el uso de apps, el contenido de sus mensajes, información sobre los hijos, la salud, las horas de sueño, lo que compra, cómo lo compra….
¿Para qué?
Un usuario se convierte en cliente y producto porque sus datos son preciados por empresas de mercadotectnia y anunciantes que quieren llegar con precisión a un potencial consumidor o votante. Si mira el tiempo en su teléfono y se aproxima una tormenta, esté seguro que le empezarán a vender paraguas en la red.
Si cree que está protegido de todos los ojos tras las paredes de su hogar, sepa que estas son totalmente transparentes.