Explosión en Manchester: cuál es el origen de los “lobos solitarios”
Los ataques terroristas de lobos solitarios resurgen porque el terrorismo por comando resulta más difícil de realizar
En los últimos 12 meses, al menos 5 ataques terroristas en Europa fueron perpetrados por hombres que actuaron solos bajo la modalidad conocida como “lobo solitario”.
Consultado por LA NACION, Roberto Russell, director de la maestría y doctorado en Estudios Internacionales de la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT), explicó el origen y la manera en que funcionan estos terroristas.
“El origen del término lobo solitario viene de los años 70 en los EEUU y tiene que ver con grupos de la extrema derecha. Ahí es donde comienza. En ese momento, se les enseñaba que tenían que matar a cualquier persona que no fuera blanca. En la actualidad, se comete el error de pensar que surgen con el terrorismo de base islamita, pero lo cierto es que hay lobos solitarios de todo tipo: nacionalistas, xenófobos, neonazis, etcétera”, dijo Russell.
- Policía identifica a Salman Abedi como atacante suicida en Manchester
- Reino Unido espera otro ataque “inminente” tras el atentado de Manchester
- Los desamparados que fueron héroes tras atentado en Manchester
Sobre las características de esta forma de ataques, detalló: “El lobo solitario actúa solo sin dependencia, ni jerárquica ni operativa, de ningún grupo. Por eso se diferencia de las células dormidas que sí son un comando que puede tener nula o muy poca vinculación con el grupo extremista. En cambio el lobo solitario no tiene ninguno directamente. Eso es porque los supremacistas blancos norteamericanos de los 70 tenían la idea de que si los apresaban no le iban a poder sacar ningún tipo de información porque estaban actuando por su cuenta. Hoy hablamos más de lobos suicidas, como fue este caso de Manchester”.
Para el especialista de la UTDT, los lobos solitarios resurgen por una nueva forma de terrorismo ya que, en la actualidad, el terrorismo por comando resulta más difícil de operar porque hay mucho más control. “En el caso del lobo solitario, como opera donde quiere, como quiere y siempre con objetivos blandos, porque atacan a la sociedad civil, resulta más difícil de detectar y, lamentablemente, seguirá creciendo”, analizó.
Cómo se forma un “lobo solitario”
“Una persona no nace lobo solitario, se hace a través de un proceso de radicalización y de infiltración ideológica por distintos medios. No siempre son personas marginales. Es muy difícil caracterizar psicológicamente a una persona así”, dijo. “La nueva forma de infiltrar y reclutar es a través de las redes sociales. Que también les da un sentido de pertenencia a personas solas o aisladas”, añadió el especialista.
Sobre cómo un grupo extremista se adjudica el accionar de un lobo solitario, relató: “Ellos dicen ‘El tipo es nuestro pero la operación la decidió él’. Por eso es tan peligroso de controlar a este tipo de personas que, además, siempre apuntan a blancos blandos como es un estadio, un puente, una rambla. No hay una dependencia jerárquica. Sí una pertenencia al grupo. No tiene nada que ver con los ataques comando en Londres o Madrid. Sobre todo porque los comandos están muy vigilados y son desarticulados antes de que ataquen en la actualidad”.
Al ser consultado de cómo eligen sus blancos, explicó: “Pegan donde más temor y miedo pueden generar, por eso atacan en EEUU y Europa y van a seguir. Vamos a vivir con eso porque es muy difícil de detectar. Porque operan solos y en base a manuales que tienen organizaciones como el Estado Islámico. Ellos leen eso, se radicalizan, creen que van a llegar al paraíso y se lanzan. En general son personas jóvenes”.
“Lobos solitarios, en la actualidad, tienen todos los grupos extremistas, no sólo el Estado Islámico. Es un modo de actuar terrorista que puede darse en cualquier cultura o país. No son sólo hombres, pero hay una mayor prevalencia”, concluyó Russell.