La Víbora: Y la ponzoña del año va para…
A nuestra serpiente comentarista del entretenimiento no se le escapa nadie
Este año estuvo muy venenosito, ¿no creen, viborolectores? Pero por más que pienso y pienso en posibles candidatos para recibir la Ponzoña de Oro de 2017, solo un nombre ronda en mi cabeza, y es el de Eduardo Yáñez.
Ya repasé mes por mes para estar segura de que ninguna personalidad se me pasa, pero la mente se me regresa una y otra vez al episodio farandulero más deleznable de los últimos años. Olvídense del megadrama de Julián Gil y Marjorie de Sousa o de las ridiculeces de las Kardashian. Es más, con decirles que ni “Rica Famosa Corriente…”, ¡perdón, “Rica Famosa Latina” pudo siquiera hacerle un poquito de sombra al episodio que protagonizó Eduardo Yáñez. Así de pesado estuvo el actor en esta ocasión.
Es por eso que el artista mexicano se hizo merecedor de la Ponzoña de Oro de 2017, y más les vale que no me lo disputen. Estoy segura que ya vieron una y otra vez el video del cachetadón que le dio este personaje a un reportero de Univision hace unos meses. No fue nada gracioso, y solo confirmó lo que muchos medios han reportado sobre Eduardo Yáñez, que es un tipo violento y fácil de perder los estribos.
Y si nos ponemos un poquito –nomás poquito– sarcásticos, quién iba a pensar que este incidente por fin iba a hacer famoso a Eduardo Yáñez en el mercado anglo. Tanto que le batalló hace unos años para entrar –sin éxito– a Hollywood para que ahora, de la noche a la mañana, su nombre figurara en cuanta publicación en inglés fuera posible. Claro, nos referimos a revistas y programas de esos morbosos que solo hablan de lo feo de los artistas, no a los que reportan noticias serias.
Con decirles que el sitio de farándula TMZ lo bautizó como “El Slapper”, o sea, algo así como El Cacheteador. Así que, ¿se necesitan más méritos para ser merecedor de la Ponzoña de Oro? ¿Verdad que no?
Por otra parte, aunque no ganaron el premio este año, tanto Marjorie de Sousa como Julián Gil se llevan una mención honorífica por ser la pareja más escandalosa y detestable del mundo de la farándula. Ambos están liados en una bola de mentiras, acusaciones mutuas, ofensas, agresiones y todo lo que ustedes quieran ponerle. ¿Y el pobrecito de Matías, hijo de ambos, por el que llevan meses peleándose? Bien gracias, es en lo último que piensan.
Y por último, no nos olvidamos de Cristian Castro, otro que por su cinismo y lo chiflado que está, debería llevarse una Ponzoña, aunque sea la de cobre. Miren que durar casado menos de un mes parece poquito, pero si es con él debe ser un eternidad, ¿no les parece? De la que se salvó su ahora exesposa.