El asesor más joven de Trump pierde la oportunidad de su vida

Taylor Weyeneth tiene 24 años de edad, se graduó de la universidad en mayo de 2016 y luego se integró a la campaña del presidente Donald Trump y, a diferencia de miles de jóvenes de su edad, ya ocupa un lugar de gran importancia en el gobierno federal: es subjefe de personal de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas (ONDCP, en inglés).

Sin embargo hay un gran problema: su inexperiencia y a ¿mentiras?, lo cual ya le está acarreando problemas, y no es para menos, ya que es responsable de una de las áreas clave de la administración del presidente Trump para enfrentar la lucha contra la adicción de opioides y otras drogas.

El trabajo de esa oficina es coordinarse con las 16 agencias que tratan esta problemática, pero este joven está perdiendo la oportunidad de su vida y pronto dejará ese cargo, como lo informó la Casa Blanca.

La única experiencia de Weyeneth para ocupar esa posición fue haber sido voluntario de la campaña del presidente, luego ser nombrado enlace de la Casa Blanca con la oficina de drogas en marzo.

La oficina, conocida como, es responsable de coordinar iniciativas antidrogas en 16 agencias federales y respaldar los esfuerzos del presidente Trump para enfrentar la epidemia de opioides.

“El señor Weyeneth decidió abandonar la ONDCP a fin de mes”, dijo el comunicado de la Casa Blanca.

El Washington Post informó que en el currículum hay inconsistencias e inexactitudes, incluidos su reporte de trabajos previos, ya que a principios del año pasado, Weyeneth revisó las fechas relacionadas con ciertos trabajos que tenía, incluido uno en un bufete de abogados de Nueva York, donde un socio de la empresa le dijo al diario que Weyeneth fue “dado de baja” porque dejó de presentarse a trabajar.

En tres currículums, Weyeneth sostuvo que tenía una maestría de la Universidad de Fordham, aunque un portavoz de la universidad dijo que Weyeneth no había completado sus cursos.