Nuevo escándalo de U$1.6 millones del abogado de Trump para silenciar a exmodelo Playboy embarazada
Michael Cohen negoció acuerdo entre recaudador republicano y modelo Playboy
No deja de hacerse más oscuro el panorama de Michael Cohen, el abogado de Donald Trump. No solo esta semana el FBI hizo una allanamiento a sus propiedades en busca de material incriminatorio sino que ahora se conoce de una nueva y grave acusación en su contra.
Un extenso reporte del Wall Street Journal reveló este viernes que Michael Cohen, el abogado personal del presidente Donald Trump, negoció a nombre del importante recaudador de fondos del Partido Republicano Elliott Broidy un acuerdo por 1.6 millones de dólares con una exmodelo de Playboy.
La versión, que cita a personas familiarizadas con el asunto e incluye un pronunciamiento de Broidy, detalla que el trato, que se negoció a finales de 2017, obligaba a la exmodelo, Keith Davidson, a mantener en secreto su relación con el político.
El acuerdo entre Broidy, al que la publicación identifica como vicepresidente de finanzas del Comité Nacional Republicano, establecía que el monto acordado se pagaría durante dos años en cuotas trimestrales, señalaron las fuentes mencionadas por el rotativo, y detalla que el primero de estos vencía el 1 de diciembre.
Broidy reconoció en un comunicado publicado por el Journal y suministrado por un portavoz que sostuvo una relación con la exmodelo y que al final de esta la mujer le contó que estaba embarazada.
No obstante, aclaró que “ella sola decidió que no quería continuar con el embarazo” y que él le ofreció apoyo financiero durante ese período difícil.
Poco después, el Journal reveló, según la versión de una persona familiarizada con el tema, que Broidy presentó vía telefónica su renuncia al cargo en el Comité Nacional Republicano, la cual fue aceptada por la presidenta de esa instancia, Ronna Romney McDaniel.
Según el diario neoyorquino, Cohen no respondió a la solicitud de un comentario sobre el tema, mientras que un portavoz del abogado de la mujer aseguró que no podía confirmar o negar la existencia de ese acuerdo.
La noticia se conoció el mismo día que Cohen acudía ante un juez de Nueva York para pedir que el FBI deje de examinar los documentos que obtuvo el lunes pasado durante los registros a sus oficinas y una habitación de hotel donde se aloja.
Agentes del FBI registraron esos lugares gracias a pistas que recibieron del fiscal especial Robert Mueller, que investiga los supuestos lazos entre Rusia y la campaña de Trump para las elecciones de 2016.
Según medios locales, los agentes del FBI tenían permiso de la Fiscalía del distrito sur de Nueva York para requisar documentos que tuvieran que ver con el pago de 130,000 dólares que Cohen hizo a la actriz porno Stormy Daniels a cambio de que mantuviera silencio sobre la relación que en 2006 mantuvo supuestamente con Trump.
Los agentes también se hicieron con documentos vinculados a Karen McDougal, una exmodelo de Playboy que asegura haber tenido otra aventura con Trump, que duró casi un año.
Como ese pago de 130,000 dólares tuvo lugar en la recta final de los comicios, hay expertos que afirman que ese dinero estaba destinado a mejorar la imagen de Trump como candidato y, por tanto, es una donación de campaña no declarada, lo que viola las leyes estadounidenses sobre financiación electoral.
Por su parte, y según el diario The Washington Post, Cohen está siendo investigado por dos delitos: infracción de las leyes de financiación de campañas electorales y fraude bancario.