Taxistas y TLC ponen luz roja a ley que reformaría la industria
Critican iniciativa del concejal Rubén Díaz para que conductores paguen $2,000 anuales para renovar las licencias y que trabajen para una sola base de taxis
Cientos de taxistas madrugaron este lunes y se tomaron los alrededores de la sede del Concejo Municipal, para manifestarse contra la propuesta de ley 838, del concejal Rubén Díaz, que pretende que quienes deseen usar algunas de las apps para conseguir pasajeros y quienes sean propietarios de vehículos de servicio público, paguen $2,000 anuales por las licencias de TLC, 300% más del valor del trámite actual ($625) y que se hace cada dos años.
Durante la demostración, los conductores gritaron a todo pulmón su oposición a la iniciativa de ley, que además establece que los autos solamente puedan estar afiliados a una sola compañía o base de taxis única. La protesta se realizó horas antes de que el Comité de Autos Contratados del Concejo analizara la propuesta, que de ser aprobada reformaría la industria de taxis.
Para conductores como el dominicano Leo García, quien se gana la vida como taxista hace 20 años, la ley de Díaz en vez de ser un alivio para sacarlos de la actual crisis que enfrentan ante el auge de servicios por aplicaciones como Uber, sería una “herida mortal” para los más de 180,000 choferes que trabajan en la Gran Manzana.
“Esto nos va a perjudicar a la mayor parte de quienes hacemos este trabajo, porque primero de dónde vamos a sacar ese dinero, más cuando estamos peleando contra el monstruo de Uber que vino a quitarnos el 35% de los ingresos”, dijo García, al tiempo que destacó que ya se siente ahorcado con la competencia que existe. “Y si nos limitan solo a una base, cómo vamos a hacer para sobrevivir, si en mi caso yo trabajo para cinco bases, 12, 13, 14 horas para hacer $150 diarios y así muchas veces es duro”.
Héctor Germán, conocido en la industria como el conductor 122, criticó fuertemente al concejal proponente del proyecto y le pidió que revise el daño que su iniciativa haría en la clase trabajadora.
“Lo que quiere hacer el reverendazo es como un tsunami y una traición para todos al querer aumentar de un solo fuetazo de $625 a $2,000 el diamante, en una industria que ya ha dejado cuatro suicidios de compañeros y que podrían aumentar”, dijo el taxista, al tiempo que criticó que se pretenda imponer a las bases pagos de $20,000.
Pero otros taxistas como Neno Hervias, quienes llegaron a la audiencia pública luciendo sombreros similares a los que suele llevar el concejal Díaz para manifestarle su apoyo, se mostraron a favor de la ley.
“Hay líderes que tienen buen corazón pero no entienden la propuesta. Esto va a traer una justa equidad para todos nosotros poder competir y para evitar ser esclavos de compañías que al final van a terminar con los chóferes”, dijo Hervias. “Nosotros los que no tenemos aplicaciones no tendremos que pagar eso, solo reclasifica a quienes quieran agregar la aplicación”.
“Daño económico a los taxistas”
Y tras ser requerida a testificar sobre el impacto de la iniciativa, Meera Joshi, comisionada de la agencia de Taxis y Limusinas de Nueva York (TLC), destacó que el proyecto de ley en cuestión reconoce la necesidad de cambios drásticos en las leyes municipales para el sector de taxis, pero al mismo tiempo cuestionó los puntos espinosos de la iniciativa.
“Hay muchas consideraciones operacionales significativas que no pueden pasarse por alto, como por ejemplo las renovaciones anuales, que son una extrema carga administrativa para los taxistas”, dijo la funcionaria, advirtiendo que ya los conductores tienen muchos costos como los seguros comerciales, el mantenimiento y la gasolina, como para imponer uno nuevo. “El requerimiento de que los vehículos solamente puedan estar afiliados a una base y que esa base solamente pueda hacer despachos de vehículos afiliados, puede también ocasionar un daño económico a los taxistas y a las bases pequeñas al limitarlos”, agregó la Comisionada de TLC destacando que actualmente más del 50% de los taxistas reciben servicios de más de una base y lo que se requiere es ampliar las posibilidades y no reducirlas.
El concejal Ydanis Rodríguez, presidente del Comité de Transporte del Concejo, aseguró que es necesario revisar a fondo la legislación para determinar sus efectos y por ahora no le dio su respaldo.
Díaz dispuesto hacer cambios
Tras la acalorada audiencia, que se extendió por más de cuatro horas, el concejal Rubén Díaz se mostró a favor de hacer cambios en la iniciativa, pero advirtió que lo que pretende la ley es que los taxistas tengan más protecciones. “Estamos abiertos a revisarla y vamos a negociar y ver a lo que podemos llegar, aunque es muy difícil complacer a todo el mundo”, comentó el político de El Bronx. “Yo quiero que los choferes sean empleados de alguien, con responsabilidad. No puedo respaldar fraude y cosas corruptas, y si logro que cada chofer tenga salud, seguro de vida, compensación, eso vale más y ahí la gloria de Dios habrá bajado al cielo”.
Dentro del paquete de leyes para reformar la industria de los taxis, también se introdujeron los proyectos 854, 855 y 856, que pretenden crear un límite de 1,000 vehículos livery por base, la exigencia de que todos sean accesibles a personas con discapacidad para el 2025 y que se estudien los posibles efectos cuando una base de taxis solicite una licencia para operar.
Exigen leyes que pongan a todos los conductores con las mismas reglas
En medio de la crisis que enfrentan miles de taxistas en la Gran Manzana ante la disminución en sus ingresos y la pérdida de valor en los medallones, que ha empujado a cuatro conductores a quitarse la vida, la Alianza de Trabajadores de Taxis de Nueva York anunció una plataforma para ponerle freno a esa problemática que incluye limitar el número de autos de servicio público. Asimismo establecer el taxímetro amarillo y verde como la tasa de tarifa mínima en toda la industria para crear una base salarial que ninguna empresa podría reducir y aumentar las tarifas, para que los conductores tengan una oportunidad de recuperación económica y establecer parámetros laborales para todos.
La organización NYTWA se reunió con varios concejales para pedir acciones legislativas y reglamentarias adecuadas para proteger el trabajo de tiempo completo y los ingresos de los conductores en todos los sectores de la industria por igual, incluidos taxis amarillos, taxis verdes, livery, automóviles negros, Uber, Lyft y otras aplicaciones.
“Le dimos nuestra palabra a las familias de nuestros hermanos fallecidos que no los olvidaremos (…) esta crisis es el resultado de la falla política para regular Wall Street y exigimos cambios inmediatos en la legislación y las reglas de TLC para proteger a los conductores profesionales”, dijo Bhairavi Desai, directora de NYTWA. “Nuestro enfoque es proteger el trabajo a tiempo completo y crear ingresos habitables. Cualquier cambio debe ser impulsado por las normas laborales y los intereses de los trabajadores y no de un sector corporativo que goce de dominio libre durante cinco años para enriquecerse con el sudor de los conductores y los trancones en las calles de la ciudad”.
Datos de la industria de taxis:
- $625 es el valor actual de la licencia del TCL para operar.
- $2,000 es el valor que pretende imponer la nueva ley.
- 2 años dura el actual diamante para operar.
- 1 año sería el tiempo que dure la licencia y cada tanto tendría que renovarse.
- 180,000 conductores tienen licencia de TLC.
- 90,000 era el número en 2011.
- 100% ha aumentado esa cifra en 7 años.
- 130,000 vehículos tienen licencia de TLC.
- 50,000 era la cifra hace 7 años.
- 3,000 nuevos conductores reciben licencias cada año.
- 1,000 taxis máximo podrían afiliarse a una base de taxis.