El mar devolvió cuerpo del niño tragado por una ola gigante en la playa
Fue arrastrado por una ola mientras paseaba con su madre en una playa de Carolina del Norte
Después de varios días de búsqueda en vano, el mar devolvió el cuerpo Wesley Belisle, niño de 4 años que había sido tragado por una ola gigante mientras paseaba con su madre en una playa de Carolina del Norte.
El cadáver fue encontrado en Carova Beach, informó la Oficina del Sheriff del condado Currituck.
La familia estaba de vacaciones procedente de New Hampshire, y aunque el clima era cálido y soleado, el oleaje era intenso con olas de hasta 6 pies en Kitty Hawk el miércoles 25 de abril.
La Guardia Costera de Estados Unidos había abandonado la búsqueda tras desplegar una tripulación de helicóptero MH-60 Jayhawk y un bote salvavidas de 47 pies para rastrear al niño por más de 130 millas náuticas cuadradas. Lo único que habían encontrado era su sombrero, hallado una hora después del incidente.