Reina latina de belleza espera recuperar su rostro tras sufrir parálisis facial
Confía en la cirugía avanzada para reparar los músculos del rostro afectados por un accidente cerebrovascular
Un accidente cerebrovascular cambió la vida de Julia Hernández de la manera más dramática para una reina de belleza como ella, al generarle una parálisis facial.
A sus 20 años, esta chica californiana de origen latino acostumbrada a participar en concursos locales para adolescentes, se acaba de someter a una primera cirugía delicada de ocho horas de duración en el Centro Médico de la Universidad de California en San Francisco (UCSF), para reconstruir su rostro paralizado hace cinco años.
“Un grupo de células sanguíneas estallaron en mi cerebro y causaron un derrame cerebral hemorrágico“, dijo en declaraciones a ABC.
Al despertar, todo había cambiado en su corta vida. “Me miré en el espejo, y vi mi cara por primera vez y me sorprendí. Sentí que mi identidad había desaparecido por completo”.
Pero con el apoyo de su familia, y especialmente de su hermana gemela Sophia y su padre, la joven fue allanando el camino a su recuperación.
Primero, la meditación la ayudó a calmar sus ataques de ansiedad. Así pudo regresar a la escuela y obtener un título universitario. Y, lo más, importante, también descubrió que la belleza verdadera está debajo de la piel.
“Hay mucho más que eso, detrás de eso, que te convierte en una persona valiosa. Pude enfocarme en lo que realmente significaba la vida“, afirma Julia.
Pero aún necesita recuperar la sonrisa perdida y volver a respirar correctamente. Por ello su hermana gemela, estudiante de medicina en UCSF, comenzó a investigar.
“Estaba viendo algunas cosas que podrían ayudar con su re-animación facial“, comenta Sophia. Así se topó en UCSF, donde el Dr. Daniel Knott se especializa en re-animaciones faciales.
Finalmente Julia fue operada el martes 1 de mayo por Knott y su colega el Dr. Rahul Seth, quienes transplantaron músculos de su muslo a la sección paralizada del rostro.
Fue una cirugía delicada y complicada que Julia espera que traiga de vuelta algunas cosas simples que ella pudo haber hecho alguna vez. “Estoy emocionada de respirar correctamente”, dijo. “Y de cantar y sonreír”.
La recuperación se perfila lenta, de aquí a un año. Pero Julia tiene fe, porque el Dr. Knott tiene una tasa de éxito de 95%.