Fallece en Nueva Jersey niña californiana que desató debate sobre muerte cerebral
En 2013 sufrió un daño cerebral irreversible durante una cirugía sencilla para extirpar sus amígdalas
Jahi McMath, una niña que estuvo en el centro de un debate médico y religioso sobre la muerte cerebral, falleció a los 17 años después de una cirugía en Nueva Jersey, informó ayer su madre.
Nailah Winkfield dijo su hija murió el 22 de junio por sangrado excesivo e insuficiencia hepática, después de una operación para tratar un problema intestinal.
El caso de McMath atrajo la atención nacional cuando su familia se negó a aceptar la conclusión de médicos que la declararon muerta en diciembre de 2013, a los 13 años de edad, después de sufrir un daño cerebral irreversible durante una cirugía sencilla para extirpar sus amígdalas, en Oakland.
En ese momento varios especialistas coincidieron después de las pruebas neurológicas y un forense firmó un certificado de defunción. Winkfield, sin embargo, dijo que sus creencias cristianas la obligaron a luchar por el cuidado continuo de su hija, de quien afirmó mostraba señales de vida mediante movimientos de los dedos en manos y pies.
Después de una batalla judicial con el Children’s Hospital de Oakland, Winkfield trasladó a su hija a Nueva Jersey, donde permaneció con soporte vital.
“Jahi no tenía muerte cerebral ni ningún tipo de muerte”, dijo Winkfield, quien abrió en Facebook una página para defender su historia. “Era una niña con una lesión cerebral y merecía que la cuidaran como a cualquier otro niño que sufrió una lesión cerebral”.