Google Maps cambia los nombres a los barrios en Estados Unidos sin razón alguna
En Nueva York apareció RAMBO y en Los Ángeles un Silver Lake Heights que no existía hace un año
Residentes de varias ciudades de Estados Unidos se han visto sorprendidos por los nombres que Google Maps tiene para los barrios donde han vivido por décadas.
En San Francisco, el área de Rincon Hill, South Beach o South of Market aparece en el app de mapas como East Cut. En Detroit, el viejo Fiskhorn cambió de orden en las letras para salir como Fishkorn en Google Maps. En Manhattan apareció un Midtown South Central entre Chelsea y Kips Bay, al sur de Koreatown.
La empresa tecnológica nunca ha dado una explicación lógica al asunto, pero residentes enfurecen cada vez que encuentran estos cambios. Para muchos se trata de robar identidades a varios vecindarios y redefinir las ciudades.
El problema viene de la manera en que Google hizo el app Maps pues se basó en información de terceros. Muchos de los nuevos nombres coinciden con las denominación que constructores y agentes de bienes raíces usan en sus proyectos. Un caso conocido en Nueva York es RAMBO (Right Around the Manhattan Bridge Overpass) entre DUMBO y el Downtown de Brooklyn. Nunca ha sido un barrio oficial.
“Es degradante para la reputación del área”, dijo Tad Bogdan al New York Times. El hombre ha vivido por 14 años en la zona de Rincon Hill en San Francisco.
Otros casos de nuevos nombres son errores que por alguna razón llegan a Google Maps como el caso de la mala digitación de Fiskhorn en Detroit. El origen del East Cut de San Francisco sería la organización sin ánimo de lucho que se creo en 2015 para limpiar y dar seguridad al área.
Un arquitecto en Los Ángeles pudo comprobar que cualquiera puede cambiar o crear un nuevo barrio en Google. El año pasado, Jeffrey Schneider, a manera de chiste, publicó un alquiler de apartamento Silver Lake Heights, un barrio que nadie conocía. Fue suficiente para que apareciera en Google Maps.
“Ahora todos los agentes de bienes raíces llaman el área así”, dijo Schneider.
Aunque todo parece un error, la situación hace dudar a muchos. ¿Beneficia Google a los constructores que encarecen los vecindarios?