Denise Maríñez se abre paso con humor en la escena neoyorkina
La dominicana Denise Maríñez, quien creció en Nueva Jersey, se abre paso en escenarios de la ciudad como comediante con divertidas anécdotas personales
Cuando Denise Maríñez trata de rescatar de la memoria recuerdos de su niñez, le llega a la mente la imagen de sus padres sentados frente al televisor disfrutando shows de comedia de la República Dominicana. Maríñez cuenta que creció en un hogar en donde la risa y el buen humor eran parte vital de la cotidianidad.
“Crecí admirando a humoristas dominicanos como Freddy Beras Goico y Cuquín Victoria, buscando el lado gracioso de todo lo que me rodeaba”, comenta la artista que creció en Nueva Jersey.
Y precisamente el humor, hacer reír a otros, es parte de su día a día con la gran particularidad de que Maríñez cohabita en dos terrenos completamente diferentes, como comediante en ‘stand-up comedy’ y shows y como experta en recursos humanos. Maríñez es egresada con honores de Rutgers School of Health Professions con especialidades en rehabilitación siquiátrica y sicología industrial.
“Tenía muchos deseos de hacer comedia, pero no me atrevía hasta que hace cerca de dos años perdí el miedo y subí a un escenario. La reacción de público fue inolvidable y mucha gente me impulso a seguir. Ha sido una experiencia fantástica y que en cierta manera se complementa con mi carrera porque me permiten conocer y estudiar gente con perfiles muy diferentes y conectar con ellos con mayor facilidad”.
Explica que su trayectoria como comediante le ha permitido aprender dos lecciones importantes, que hay chistes que no son aceptados por todo tipo de público y que es importante no tomar de manera personal nada que diga el público con el fin de sentir plena libertad de decir lo que piensa sin censurarse.
“He salido un poco desanimada de lugares en los que quizás no funcionaron los chistes de la manera que esperaba, pero luego frente a otro público esos mismo chistes resultan un éxito. Mi meta es hacer reír al público, conectar con ellos, pero trato de no dejar que interfieran en mi material, porque de lo contrario terminaría limitándome. Es inevitable que a unos a unos les guste lo que haces y que a otros no les guste o se sientan ofendidos”, agrega Maríñez quien tiene un hermano mayor.
La Junta del Desfile Dominicano eligió este año ala comediante entre 23 dominicanos sobresalientes de la comunidad dominicana en Nueva York. Distinción que “recibí con mucho orgullo”, comenta.
Mariñez conecta con el público tan pronto comienza su rutina de humor. En sus chistes cuenta divertidas anécdotas sobre su vida amorosa y sobre su familia. “Mi material para los chistes sale de experiencias personales y sobre todo de la gente que observo, de las situaciones cotidianas. Siento que vivo un sueño porque me satisface mucho subir a escena y poder hacer lo que me gusta”, agrega.
Sentido de pertenencia
Para Denise Maríñez uno de los retos más grandes de ser dominicana en Estados Unidos es encontrar el espacio cultural y étnico al que se pertenece. Cuando era pequeña nunca hablábamos de ese tema, porque era fácil explicar soy dominicana y punto. Luego comienzas a encontrar otros matices dentro de eso y a ir más lejos en esa búsqueda. En mi caso esa exploración me llevó a la conclusión de sentir el orgullo de ser dominicana y a encontrar mi verdadera identidad a través de las raíces africanas como afro latina”, concluye.
Maríñez se ha presentado en lugares como Carolines on Broadway, The People Improv Theater, Broadway Comedy Club y Stress Factory, entre otros espacios.