Renuncia Nikki Haley, embajadora de Estados Unidos ante la ONU
La exgobernadora de Carolina del Sur era férrea defensora de la política exterior del presidente Trump
El presidente Donald Trump aceptó la renuncia de Nikki Haley, quien se desempeñaba como embajadora de los Estados Unidos ante las Naciones Unidas.
Fue Axios el primero en reportar la información, según dos fuertes consultadas, pero el mandatario confirmó la información en conferencia de prensa en la Casa Blanca, junto a la exgobernadora de Carolina del Sur.
El presidente Trump publicó en su cuenta de Twitter que a las 10:30 a.m. daría un anuncio importante con su “amiga” Haley, aunque el anuncio fue dado pasadas las 11:00 a.m., donde el presidente Trump lamentó la salida de la embajadora, que será efectiva a finales de año, sin precisar la fecha.
“Ha sido muy especial para mí… ha hecho un gran trabajo, es una persona fantástica”, dijo el mandatario. “Ha estado en la ONU desde el principio. Hace seis meses me dijo: ‘Quiero tomarme un tiempo a final de año'”.
Destacó la labor de Haley en las negociaciones con Corea del Norte, Rusia y varias naciones en el conflicto sobre Siria.
“Resolvimos grandes problemas… como Corea del Norte… Estoy feliz por ti“, dijo el republicano. “Espero que vuelvas en algún momento.
Estará en contacto constante”.
El presidente Trump no dijo quién ocuparía la posición, pero que tenía algunas opciones sobre la mesa.
Big announcement with my friend Ambassador Nikki Haley in the Oval Office at 10:30am.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 9, 2018
“Quiero agradecer al presidente“, comenzó diciendo Haley, quien afirmó que no había motivos personales para renunciar, ya que consideró que cualquier funcionario debe ser consciente de cuándo “debe hacerse a un lado”.
“Ha sido un honor”, expresó en referencia a su labor con el presidente Trump y agregó que no competirá en las elecciones 2020, sino que hará campaña por el mandatario republicano.
“Mi objetivo es que todo esté en el lugar correcto”, acotó sobre el tiempo que tardará en dejar su posición.
Una de las más polémicas acciones que protagonizó como representante de la Administración Trump fue la salida de EEUU del Consejo de Derechos Humanos.
“Damos este paso porque nuestro compromiso no nos permite seguir siendo parte de una organización hipócrita y egoísta que se burla de derechos humanos”, expresó en junio pasado. “Quiero dejar muy claro que al dar este paso no nos estamos retirando de nuestros compromisos con los derechos humanos“.
Al justificar su decisión, Haley agregó que el órgano padece de una crónica parcialización contra Israel.
En abril tuvo diferencias con oficiales de la Casa Blanca sobre sanciones a Rusia, donde acusaron a Haley de haberse “confundido”, luego de que anunciara nuevas sanciones de la Administración Trump contra el gobierno de Vladimir Putin tras el ataque a Siria, en una sesión del Consejo de Seguridad donde hubo tensiones con los representantes de Rusia y Siria, a tal grado que el secretario general del organismo, Antonio Guterres, indicó que “la Guerra Fría había vuelto por una revancha”.
Tras el anuncio de la Embajadora, la Casa Blanca informó que el presidente Trump no firmó las sanciones, por lo que Haley no había “entendido” la decisión de la administración federal.
Entonces la exgobernadora refutó: “Con el debido respeto, no me confundo”.