Los daños de la luz del celular en tu salud y tu piel
Los expertos afirman que los niños no deberían ser expuestos a las pantallas de los celulares antes de los dos años
La tecnología no es todo lo beneficiosa que creemos, sobre todo porque no solo crea adicción, sino que también resulta dañina para nuestro organismo.
Muchos pensarán que no hay nada nuevo en esto, que ya se ha hablado en miles de ocasiones sobre la necesidad de “volver al pasado”, o lo que es lo mismo: realizar una desintoxicación digital. Pero si supieras lo que tu celular te está haciendo por dentro y por fuera, tal vez lo pensarías mejor.
Si cada día anotamos el número de horas que pasamos frente a una pantalla quizás nos asustemos, pero tranquilos, todo se puede remediar.
Tanto si el motivo por el que miramos el celular (o el computador) más que a nuestra pareja es por gusto o por trabajo, hay unos sencillos pasos a seguir para que no nos afecte más de la cuenta. Para que no dañemos ni nuestra salud, nuestra belleza o nuestra relación de pareja.
Porque sí, pasar demasiado tiempo en redes sociales afecta a la forma en la que nos relacionamos, pero es que el brillo de esas páginas también nos daña.
Hablamos, literalmente, de la luz que emiten las pantallas cuando se iluminan, un brillo denominado “luz visible”.
El espectro de luz visible se divide en varios colores, cada uno con su propia longitud de onda. La banda de color azul/violeta de longitud de onda corta se conoce como luz visible de alta energía, o luz HEV, una palabra de moda en el mundo de la belleza.
“Siempre nos hemos centrado en el daño causado por los rayos UV porque en teoría la luz UV es más poderosa para inducir daños generales en la piel que la luz visible, pero resulta que estamos expuestos a mucha más luz visible a lo largo del día””, cuenta a Cosmopoiltan Steven Q. Wang, MD, director de cirugía y dermatología del Centro de Cáncer del Memorial Sloan Kettering, en Basking Ridge, Nueva Jersey.
La investigación sobre la luz visible y la salud de la piel aún es muy reciente y los estudios están en curso, pero esto es lo que los expertos saben por el momento: no hay un vínculo comprobado entre la luz visible y el cáncer de piel, admite Wang, pero, al igual que los rayos UV, la luz HEV es fuerte y puede penetrar profundamente en la piel, provocando inflamación y desatando radicales libres, esas moléculas que atacan nuestras células, contribuyendo al envejecimiento prematuro y una serie de enfermedades degenerativas.
Los estudios demuestran que uno de los riesgos para la piel que presenta la luz HEV es la hiperpigmentación, que produce manchas marrones persistentes. “Cada vez más estudios demuestran que la luz azul intensa puede causar un oscurecimiento de la pigmentación, especialmente en aquellos con tonos de piel más oscuros, como los asiáticos, los hispanos y los afroamericanos“, dice Wang.
No hay necesidad de volverse paranoico sobre los peligros de la “luz visible”, o luz azul, pero sí es aconsejable cambiar algunos hábitos de nuestra rutina que nos pueden ayudar a que nuestra piel se vea mejor.
Te aconsejamos que limites el uso del celular. No es cuestión de que des de baja tu cuenta de Instagram o dejes de chequear Twitter, no. Más bien se trata de no hacerlo todo el tiempo, así también lo disfrutarás más y estarás cuidando tu piel evitando que la luz de la pantalla penetre tu organismo.
Si de verdad no puedes vivir sin tu celular, hay alternativas como bajarle la luminancia a la pantalla o descarga una aplicación de luz roja, que reflejan tonos más cálidos en lugar de los azules fríos que normalmente emite tu pantalla.
Recuerda que hablamos de tu piel y que es importante que la cuides y la hidrates, siempre agregando un protector solar a tu cuidado diario.
Muchas cremas ya añaden antioxidantes y pigmentos especiales para combatir los efectos de la luz azul y brindan una protección de amplio espectro contra los rayos UVA y UVB, además de proteger contra la luz HEV.
Con estos consejos tu piel te lo agradecerá y lucirás más joven, sin arrugas prematuras.
Pero no hay crema que ayude a solucionar la adicción. ¡Ese es otro tema!