Melania gana “pulso de poder” en la Casa Blanca
Mira Ricardel tuvo enfrentamientos con personal de la Primera Dama en su reciente viaje a África
La inesperada petición de Melania Trump al interior de la Casa Blanca de despedir a una funcionaria del gobierno que se enfrentó a su equipo en su viaje a Africa es considerada una victoria para la primera dama.
Fue así como este miércoles la Casa Blanca anunció la salida de Mira Ricardel, la asesora adjunta de seguridad nacional del presidente, Donald Trump, un día después de que Melania exigiera abiertamente su despido.
“Mira Ricardel seguirá apoyando al presidente al abandonar la Casa Blanca y emprender una transición a un nuevo cargo dentro del Gobierno”, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, en un comunicado.
“El presidente está agradecido por el servicio constante de la señora Ricardel al pueblo estadounidense y por su férrea defensa de sus prioridades de seguridad nacional”, agregó la portavoz.
Sanders no precisó cuál será el nuevo cargo de Ricardel, que hasta ahora era la “número dos” del asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, y ocupaba como tal un destacado papel en los debates sobre política exterior en el Gobierno.
Stephanie Grisham, la directora de comunicación de Melania Trump, emitió este martes un comunicado en el que aseguraba que, a juicio de la primera dama, Ricardel “ya no merece el honor de servir en esta Casa Blanca”.
Según varios medios de comunicación, Ricardel se enfrentó con el personal de la primera dama por una cuestión relacionada con el viaje de Melania a África, que ocurrió en octubre.
El diario The Wall Street Journal señaló que Melania sospechaba, además, de que Ricardel había filtrado historias negativas sobre ella y su equipo a los medios.
El rotativo también apuntó que la asesora había tenido problemas con el secretario de Defensa, James Mattis, por “diferencias políticas”.
Ricardel, de 58 años, asumió el cargo de asesora adjunta de Seguridad Nacional en mayo, un mes después de que Trump nombrara a Bolton para reemplazar al general H.R. McMaster.
La inédita petición de la primera dama llegó en medio de los rumores que indican que Trump estaría considerando despedir a su jefe de Gabinete, John Kelly, y a la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, entre otros.