Alcaldía enfrenta críticas tras caos por tormenta de nieve
Al menos seis pulgadas de nieve convirtieron las calles de NYC en un estacionamiento por horas
Mientras este viernes los neoyorquinos intentaban recobrar la normalidad, las autoridades locales tuvieron que hacer frente a las críticas por el caos ocasionado por una tormenta de nieve que dejó más de seis pulgadas de acumulación la tarde del jueves, en medio de la hora pico.
Sin alertas ni códigos de prevención, la tormenta, que pasará a la historia como la caída de nieve en noviembre más fuerte en los últimos 136 años, dejó tumultos de ciudadanos desesperados en autopistas, terminales de buses y trenes, y hasta decenas de niños en buses escolares atascados en el tráfico.
Lo que se preveía como un día normal de nieve, con una predicción de acumulación de entre 1 y 2 pulgadas, se convirtió en una pesadilla.
Una oleada de nieve y viento se apoderó del área tri-estatal, y en menos de dos horas, el tráfico en el puente George Washington colapsó. El segundo nivel de este importante puente, que transporta millones de personas a diario, se transformó en una imagen de película, con miles de conductores abandonando sus vehículos tras varios accidentes y horas atascados en la congelada calle.
El problema creció cuando otros conductores desesperados trataron de encontrar vías alternas, encontrándose con autopistas y calles que no habían sido preparadas para la nieve, creando aún más caos en el Major Deegan Expressway en el Bronx, Lincoln Tunnel y casi todas las arterias víales de la ciudad.
Entretanto, quienes viajan desde y hacia NYC a través de la Terminal de Buses de Port Authority se vieron encerrados en un mar de gente durante horas. Carrol Patrick, una residente de Farfield, Nueva Jersey, decidió abandonar la terminal y buscar una bebida.
“No había forma de saber a que hora saldría un bus así que muchos decidimos irnos a tomar un trago”, dijo la colombiana, quien aseguró pudo tomar un bus pasada la media noche.
Algunas personas estuvieron atascadas en el tráfico hasta 10 horas, incluidos decenas de estudiantes, que viajaban en buses escolares. De acuerdo con el canciller de educación, Richard A. Carranza, el último estudiante en llegar a su casa lo hizo a las 3:00 am. Casi el 12% de todos los buses del sistema de transporte escolar de la ciudad tuvo retrasos excesivos.
“Anoche tuvimos muchos estudiantes que estuvieron en los buses escolares que tuvieron retrasos de hasta 5 horas”, dijo Carranza. “El último niño llegó a su casa a las 3:00 a.m. Las circunstancias no nos ayudaron a prevenir ese asunto, pero estamos muy agradecidos que los niños llegaron a salvo a sus casas”.
Los comentarios del canciller hicieron eco a los del alcalde Bill de Blasio, quien este viernes realizó una rueda de prensa de emergencia en el salón azul del City Hall para tratar de explicar detalles de la emergencia, luego de enfrentar la crítica de algunos neoyorquinos que se volcaron a las redes sociales para culpar al líder político de la emergencia.
“Al igual que la mayoría de los neoyorquinos me siento frustrado por los problemas de anoche”, indicó de Blasio. “Estábamos listos para la tormenta pero nos golpeó más fuerte de lo que pensábamos”.
De Blasio aseguró que “no se trata de encontrar un culpable”, pero anunció que se hará una auditoria a todas las agencias de la ciudad involucradas para tratar de encontrar la raíz del problema, que asegura, se debió en parte a “lo inesperado del clima”.
“No sabíamos que iba a ser así. Ni siquiera el miércoles por la noche o el jueves por la mañana porque pensamos que recibiríamos de 1 a 2 pulgadas y eso es algo muy normal en Nueva York”, indicó el alcalde. “Apenas nos percatamos que podríamos recibir más nieve a las 12:45 y a esa hora ya todo el mundo estaba en la ciudad con sus vehículos”.
Ahora bien, algunos miembros del Concejo Municipal, criticaron la respuesta de la Ciudad, incluido el concejal Fernando Cabrera, calificó la respuesta del Departamento de Sanidad como un “fracaso”.
“En lugar del término “todos los sistemas funcionan”, la respuesta del Departamento de Sanidad solo se puede describir como todos los sistemas fallan”, dijo Cabrera. “Hace varias semanas, el Departamento de Sanidad de la Ciudad de Nueva York implementó un impresionante plan de respuesta a la nieve, pero no pudo poner en marcha el plan durante una emergencia de nieve real”.
El líder político destacó su indignación e hizo un llamado a sus colegas para realizar una audiencia sobre la respuesta de la agencia de la Ciudad.
“Estoy pidiendo a mis colegas del Concejo Municipal que celebren una audiencia para abordar el fracaso y garantizar que no se repita”, conlcuyó.
Por su parte, Corey Johnson, presidente del Concejo, pidió disculpas a los neoyorquinos y aseguró que la Ciudad pudo haber hecho un mejor trabajo de preparación.
“Siento mucho que los neoyorquinos hayan tenido una mala experiencia este jueves, pero nosotros en el Concejo Municipal vamos a presionar para tener una mejor respuesta en el futuro”.