George W. Bush: “La inmigración es una bendición y una fortaleza”
Durante su discurso en una ceremonia de naturalización, el expresidente también mencionó la necesidad de "modernizar nuestras leyes migrantorias"
George W. Bush dio este lunes la bienvenida a 48 personas que acaban de obtener la ciudadanía estadounidense. En una ceremonia de naturalización celebrada en su centro presidencial, el expresidente (2001?2009) republicano resaltó los aspectos positivos que, para él, tiene la inmigración en Estados Unidos. “La inmigración es una bendición y una fortaleza”, fue su frase estrella. La exprimera dama, Laura Bush, también dedicó unas palabras de acogida a los asistentes, que -según la información publicada en la web del centro- son originarios de más de 20 países.
#ICYMI: 49 immigrants were sworn in as US citizens at a naturalization ceremony at the Bush Center where President and Mrs. Bush delivered remarks on #immigration and border security. Check out a photo recap: https://t.co/ejYDwsNxUH
— George W. Bush Presidential Center (@TheBushCenter) March 18, 2019
Laura Bush fue la encargada de abrir el acto y de dirigirse en primer lugar a los nuevos ciudadanos: “nuestro estado” -dijo, en referencia a Texas – “es una tierra de migrantes. Somos un estado más rico gracias a las culturas que se han asentado en nuestra tierra”. También hizo referencia a su historia de vida y dijo que “nunca hubiera conocido a su marido si sus suegros no hubieran decidido migrar de la costa este a la ciudad (texana) de Midland, durante el boom del petróleo”.
Por su parte, el expresidente Bush habló de las “generaciones de recién llegados [que] han dejado su huella en nuestro carácter nacional, en rasgos que los amigos en el extranjero todavía reconocen como claramente estadounidenses: nuestro optimismo, nuestra independencia y apertura a lo nuevo, nuestra voluntad de luchar y arriesgarnos, nuestro sentido de la vida como una aventura, dignificada por la libertad y responsabilidad personal”.
George W. Bush finalizó su intervención, de unos siete minutos de duración, felicitando y bendiciendo a sus nuevos conciudadanos. “El camino desde la solicitud [de la ciudadanía] hasta el juramento termina en una hermosa mañana en el gran estado de Texas” -dijo el republicano, que un poco antes había hablado de la necesidad de “modernizar nuestras leyes migrantorias“.