Trump se monta al fracaso de AMLO de contener la violencia: “México es uno de los países más peligrosos”
El Gobierno de EEUU enviará más soldados y agentes de inmigración a la frontera
El presidente Donald Trump se sumó a las críticas a México por el aumento de la violencia en los últimos meses y volvió a calificarlo como “uno de los países más peligrosos del mundo”.
Aunque el mandatario republicano se enfoca a los hechos que ocurren en la frontera, su mensaje llega luego una editorial de The Wall Street Journal que resume los reportes de medios mexicanos y fue motivo de un enfrentamiento entre el periodista Jorge Ramos, de Univision, y el presidente Andrés Manuel López Obrador: el crimen aumentó 9.6 por ciento en los primeros tres meses del año, en comparación con el mismo periodo de 2018. Es el peor inicio de año en los úlimos 19.
El crimen organizado es el principal causante de la violencia en México y el tuit del presidente Trump no separa el problema del tráfico de personas, aunque aprovecha para exigirle al Gobierno de López Obrador detener las caravanas de inmigrantes centroamericanos.
“Los coyotes y los cárteles de la droga tienen el control total del lado mexicano de la frontera sur. Tienen laboratorios cerca donde fabrican drogas para vender en los EEUU”, acusa el mandatario republicano. “México, uno de los países más peligrosos del mundo, deben erradicar este problema ahora. Además, deben detener las caravanas hacia EEUU”.
The Coyotes and Drug Cartels are in total control of the Mexico side of the Southern Border. They have labs nearby where they make drugs to sell into the U.S. Mexico, one of the most dangerous country’s in the world, must eradicate this problem now. Also, stop the MARCH to U.S.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) April 30, 2019
El presidente Trump aprovecha la crisis que vive México para utilizarla con fines políticos, pero no miente sobre la situación en aquel país, aunque hasta ahora el presidente López Obrador ha dicho que “no caerá en provocaciones” ante las críticas y presiones del estadounidense, su Administración ha aumentado la detención de inmigrantes con redadas al sur del país.
Hace poco más de una semana, el presidente mexicano finalmente reconoció que hay un problema de inseguridad y se prometió a reducirla en seis meses. A los pocos días entró en funcionamiento la Guardia Nacional en varias entidades, incluso en la Ciudad de México, donde las batallas entre células de cárteles siguen dejando cuerpos en varios puntos, incluso en Paseo de la Reforma, la principal avenida de la capital.
La tensión en la frontera irá en aumento, como incluso lo reconoció el canciller mexicano Marcelo Ebrard, quien pidió a los Estados Unidos una reunión urgente para atender los retrasos del tránsito comercial cuyas pérdidas son millonarias, según cámaras de comercio mexicanas.
Al mismo tiempo, los departamentos de Seguridad Nacional (DHS) y de Defensa envían más elementos al cruce con México, para atender los tres problemas que el presidente Trump ha priorizado: el tráfico de drogas, el coyotaje y el cruce de indocumentados.
La oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), parte del DHS, reorienta recursos de Inteligencia para detectar a los traficantes de personas y drogas, mientras el Ejército enviará a 320 soldados más.
En tanto, el presidente mexicano prefiere callar “no entrar en provocaciones”, “amor y paz”, afirma, sin que presente un plan serio para cumplir su promesa de reducir el crimen.