Alfredo Adame sigue en el escándalo: corrió de su casa a su hijo mayor
Diego se puso del lado de su madre Mary Paz Banquells
Alfredo Adame. Crédito: Ángel Delgado | Agencia Reforma
Alfredo Adame no puede mantenerse lejos de los escándalos. Una vez más ha ventilado los problemas familiares que se desencadenaron a partir de su divorcio de Mary Paz Banquells.
El actor que en últimas fechas ha retado al cazafantasmas Carlos Trejo a una pelea a mano limpia, pero también cobijó a su hijo Sebastián, que decidió salir del clóset, explotó cuando le peguntaron por Diego, el mayor de sus vástagos.
“Me faltó al respeto, fue a mi casa y me dijo mentiroso, y lo corrí de mi casa”, expresó alterado como acostumbra el hombre de 60 años.
“A mí no me va a decir mentiroso, tengo honor”, agregó.
Después de años de formar una pareja en apariencia estable, Alfredo y Mary Paz se separaron, dejando trozos de dignidad por doquier con declaraciones furiosas y escandalosas. La hermana de Rocío Banquells se ha guardado y se ha mantenido ajena lo más posible al conflicto, pero el histrión explota en cada ocasión que puede.
“Yo los eduqué perfectamente bien, de mi recibieron todo lo bueno, la parte económica, todo, ya si le dio al otro por apoyar a la mamá, pues, bien, pero no le puedes faltar al respeto a tu padre”, agregó.
Alfredo negó cualquier posibilidad de reconciliación con Diego a menos de que le pida una disculpa.
“Aquí está mi hijo y el otro… el que sea mi hijo (Diego) no es salvoconducto para que le deje pasar esas cosas“, agregó.
Diego no quiere ser como su padre
El hijo mayor de Alfredo Adame ha manifestado que no quiere ser como su padre. Después de refugiarse en la terapia para soportar las cosas que sucedieron en casa, dijo.
“Sí hubo cuestiones que estaba adoptando de él (Alfredo Adame), incluso llegó un momento en el que decía: ‘Me da miedo convertirme en él’. Al final de cuentas entendí gracias a mi terapia que eso no tiene que pasar, soy un individuo completamente diferente, voy a cometer mis propios errores, voy a tener mis propios patrones como todo ser humano”.
