¿Qué son los ácidos grasos y cuáles son sus beneficios?
Los ácidos grasos son esenciales para el organismo del ser humano
Los ácidos grasos son compuestos químicos donde predomina el oxígeno, carbono e hidrógeno. Con estos elementos, los ácidos grasos se crean y componen de manera natural en los animales, las plantas y los seres humanos.
Hay que destacar que la mayoría de los ácidos grasos están compuestos por átomos de carbono, y por eso existen diferentes tipos.
Ácidos grasos saturados
Estos ácidos se encuentran en estado sólido desde 12 moléculas de átomos de carbono. Una cantidad inferior a esta haría posible encontrarlos en estado líquido. Las grasas de origen animal son ricas en este tipo de ácidos, y a temperatura ambiente suelen ser sólidas.
La importancia de estos ácidos en particular es que se encargan del buen funcionamiento de las células, ya que están asociadas con la constitución de las membranas y de las proteínas de cada célula, para que estas puedan funcionar correctamente.
Ácidos grasos insaturados
Este tipo de ácidos se dividen en 2: monoinsaturados y poliinsaturados. En el caso de los monoinsaturados, estos son de procedencia vegetal. Son importantes para mantener las estructuras de las membranas celulares, sobre todo de las del sistema nervioso.
Los poliinsaturados a su vez se dividen en 2 grupos: Omega-3 y Omega-6. La importancia del Omega-3 contribuyen a la formación de los tejidos, y se encuentran, en su gran mayoría, en las grasas de los peces.
El Omega-6 interviene en la formación directa de las células eiteliales, estas recubren la superficie del cuerpo, y se encuentran también en los vasos sanguíneos, en los órganos y el tracto urinario.
Hay que tener en cuenta que estos ácidos no se producen de forma natural en el organismo de los seres humanos, por lo que es importante consumir pescados y otros alimentos que lo contengan.
Los ácidos grasos en la alimentación
Si bien los ácidos grasos son importantes para el cuerpo humano, como los Omegas, hay otros que son totalmente perjudiciales para la salud. En el caso de las grasas saturadas, estas incrementan los niveles del colesterol malo, lo que originaría problemas cardíacos y problemas de circulación.
Por eso es importante disminuir el consumo de alimentos como la mantequilla y la margarina, quesos, carnes con altos contenidos de grasa, y aceites vegetales de palma, de coco y de palmiche.
De la misma forma, debes evitar las grasas trans, pues estas son peligrosas, ya que suelen endurecer y congestionar las arterias sanguíneas, lo que dificulta la circulación de la sangre. Evita comer alimentos procesados y comidas que usen este tipo de grasas para su conservación.