En plena crisis con Rosselló en Puerto Rico, Trump vuelve a mentir sobre ayuda a la isla
El presidente exagera las cifras sobre ayudas aprobadas en el Congreso federal tras María; la emprende contra los políticos corruptos en la Isla y dice que el gobernador "está bajo asedio"
WASHINGTON – El presidente Donald Trump arremetió hoy contra los líderes “corruptos” de Puerto Rico y les acusó de “robar todo lo que pueden” a su Gobierno, en un momento de crisis política en la isla, donde hay fuertes presiones para que dimita su gobernador, Ricardo Rosselló.
“Están pasando muchas cosas malas en Puerto Rico. El gobernador está bajo asedio, la alcaldesa de San Juan es una persona despreciable e incompetente en la que no confiaría bajo ninguna circunstancia”, escribió Trump en su cuenta oficial de Twitter.
Trump añadió que “el Congreso de Estados Unidos les entregó estúpidamente $92,000 millones de dólares para aliviar (las necesidades en la isla) por el paso de huracanes, y mucha de esa cantidad fue malgastada o despilfarrada, y no se la volvió a ver”.
“Eso es más del doble de la cantidad que dimos a Texas y Florida juntos. Conozco bien al pueblo de Puerto Rico, y son geniales. Pero muchos de sus líderes son corruptos, ¡y están robando al Gobierno de EEUU todo lo que pueden!”, agregó.
El mandatario volvía así a exagerar la ayuda federal entregada a Puerto Rico para su reconstrucción, porque al menos hasta mayo solo se habían desembolsado $11,200 millones en ayuda federal y se habían anunciado otros $41,000 millones.
Trump ha citado varias veces la cifra de $91,000 millones de dólares, que parece derivar de un cálculo de una de las agencias gubernamentales sobre la cantidad que podría dedicarse a la isla en las próximas dos décadas si el programa de ayuda sigue activo, pero no encaja con los fondos aportados hasta ahora.
El mes pasado, Trump firmó una ley que autorizaba el desembolso de $1,000 millones de dólares adicionales para sufragar las tareas de recuperación del huracán María, que sacudió la isla en septiembre de 2017, y el presidente parece haber sumado esa cantidad para llegar al dato exagerado de $92,000.
En los últimos dos años, Trump ha criticado duramente a Puerto Rico, un territorio que, como estado libre asociado, no tiene derecho a sufragio en la elección del presidente.
Después de visitar Puerto Rico en 2017, Trump aseguró que el huracán María no era “una catástrofe real” como sí lo fue Katrina en 2005, y el año pasado negó que ese ciclón provocara casi $3,000 muertes, como indica un informe académico respaldado por las autoridades puertorriqueñas.
El mandatario también ha acusado públicamente a los políticos de la isla de utilizar los fondos destinados a la reconstrucción para solventar otros gastos relacionados con su multimillonaria deuda.
Esta semana, un portavoz de la Casa Blanca, Judd Deere, afirmó que el escándalo desatado por Rosselló “demuestra que la preocupación del presidente por su mala gestión, politización y corrupción era válida”.
Las tensiones en la isla se deben a la divulgación del contenido de un chat en el que Rosselló, junto a varios miembros de su círculo íntimo, se mofaban e insultaban a periodistas, líderes políticos de todos los colores, colectivos sociales y rostros conocidos.
Desde entonces, se han registrado protestas diarias para pedir la dimisión de Rosselló, quien ha pedido perdón por el contenido del chat pero ha reiterado que tiene previsto mantenerse en el poder.