Robert Mueller afirma que Trump no fue exonerado y podría ser acusado de un crimen al dejar la presidencia
El exfiscal especial, sin embargo, mantiene distancia y no precisa si el mandatario debería ser acusado
El exfiscal especial Robert Mueller dejó claro, ante los miembros de los comités Judicial y de Inteligencia de la Cámara de Representantes, que el presidente Donald Trump no fue exonerado en su investigación sobre actos que presuntamente cometió, particularmente obstrucción de la justicia.
Aunque también indica que el mandatario podría ser acusado de un delito cuando deje la Casa Blanca, Mueller mantiene distancia y no señala si el republicano debería ser acusado.
Fue el representante republicano Ken Buck (CO), quien pidió al Mueller aclarar sobre un posible cargo al mandatario.
“¿Podría acusar a un presidente de un crimen después de dejar el cargo?”, cuestionó.
Mueller respondió con un “sí”, entonces Buck insistió quie si crecía que el mandatario había comprometido su persona por obstrucción de la justicia en la investigación sobre la intervención de Rusia en las elecciones de 2016.
“Sí”, repitió Mueller. Buck quiso aclarar si se refería a estándares éticos.
“No estoy seguro, porque no he observado los estándares de ética, pero la opinión de la OLC (Oficina Legal) dice que el fiscal, si bien no puede presentar cargos contra un presidente en funciones, puede continuar la investigación para ver si hay otros personas involucradas en la conspiración”, apuntó el exfiscal especial.
Durante los cuestionamientos de demócrata Jerrod Nadler (N.Y.), Mueller indicó que su reporte no exonera al presidente Trump.
“En realidad no puede concluir que el presidente no cometió obstrucción de la justicia, ¿es correcto?”, expuso Nadler.
El exfiscal especial precisó nuevamente que el Departamento de Justicia no puede acusar al presidente en funciones de un delito.
“Bueno, al principio decidimos que, en lo que respecta a la culpabilidad del presidente, necesitábamos avanzar, solo después de tomar en cuenta la opinión de la OLC que indicaba que un presidente en ejercicio no puede ser acusado”, apuntó.
Nadler acota que el informe de casi 500 páginas no concluyó que no hubo obstrucción de justicia, pero quiso que Mueller lo precisara.
“Eso es correcto”, indica.
El demócrata planteó entonces si Mueller exoneró al mandatario.
“No”, dijo. Nadler cuestiona si en el informe se precisa que no se exonera al mandatario. “Lo hace”, indicó el exfiscal especial, quien en respuestas la mayoría de las veces en monosílabos también dijo que durante más de un año intentó entrevistar al presidente Trump.
“Sí” y “es cierto” fueron las respuestas cuando Nadler lanzó: “¿El presidente rechazó una solicitud para ser entrevistado por usted y su equipo?” y “¿Es verdad que intentó durante más de un año asegurar una entrevista con el presidente?”
Rusia prefería a Trump
El exfiscal especial reconoció que Rusia intervino en las elecciones en 2016 y que su competidor favorito era el mandatario republicano, no la demócrata Hillary Clinton.
La representante Zoe Lofgren (D-Ca.) preguntó si su investigación descubrió que “el gobierno ruso percibió que se beneficiaría si uno de los candidatos ganara”. Él respondió afirmativamente.
“¿Y qué candidato sería?”, insistió la representante.
“Bueno, sería Trump”, fue la respuesta de Mueller, a quien el representante Doug Collins (R-GA) intentó que contradijera su informe al preguntarle si “colusión” y “conspiración” son lo mismo, pero el exfiscal rechazó que fueran lo mismo, además de insistir que “colusión” no es un delito marcado en las normas estadounidenses.
El presidente Trump ha insistido que no hubo “colusión”, como si esto fuera un crimen, cuando lo que persiguen los abogados, según el propio reporte de Mueller, es la conspiración, la cual a veces se utiliza como un sinónimo en otros contextos.
Agregó que no deberían subestimarse los intentos de los rusos de intervenir en las elecciones.
“Las acusaciones contra los rusos, dos diferentes, fueron sustanciales en su alcance… Y creo que hemos subestimado en cierta medida el aspecto de nuestra investigación que ha causado y tendrá un daño a largo plazo para el Estados Unidos a los que tenemos que movernos rápidamente para atender”, consideró.
El presidente agradece… tras enfurecer
El presidente Trump siguió la transmisión de la audiencia y tuitéo en varios momentos, pero al final colocó como tuit principal un mensaje a los demócratas.
“Me gustaría agradecer a los demócratas por celebrar la audiencia de esta mañana. Ahora, después de 3 horas, Robert Mueller tiene que someterse a sí mismo a#ShiftySchiff (sospechoso, sic). ¡Una vergüenza para nuestro país!”, consideró.
I would like to thank the Democrats for holding this morning’s hearing. Now, after 3 hours, Robert Mueller has to subject himself to #ShiftySchiff – an Embarrassment to our Country!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 24, 2019
Una hora y media antes de comenzar la audiencia, el mandatario expresó su enojo sobre la solicitud de último minuto de Mueller para que uno de sus mejores oficiales compareciera junto a él durante el testimonio, considerando que no era un acuerdo.
“NUNCA hubo un acuerdo para que Robert Mueller pudiera usar a uno de sus muchos abogados demócratas no trumpistas para sentarse junto a él y ayudarlo con sus respuestas”, escribió el presidente. “Esto NO fue acordado específicamente, y NUNCA lo habría aceptado. ¡La mejor cacería de brujas en la historia de los Estados Unidos, por mucho!”
El mandatario se refería a Aaron Zebley, un colaborador de la investigación de 22 meses del exfiscal que se desempeñó como jefe de personal. Los republicanos en el Comité Judicial se opusieron al anuncio sorpresa.
It was NEVER agreed that Robert Mueller could use one of his many Democrat Never Trumper lawyers to sit next to him and help him with his answers. This was specifically NOT agreed to, and I would NEVER have agreed to it. The Greatest Witch Hunt in U.S. history, by far!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 24, 2019