El “ojo lleno de sangre” de Joe Biden que desata alertas sobre su salud

El exvicepresidente Joe Biden ha estado bajo el escrutinio público y de oponentes por supuestos problemas de salud, los cuales volvieron a ser surgir tras un reporte de tener un problema en el ojo izquierdo.

El ojo izquierdo del aspirante demócrata a la presidencia parecía estar lleno de sangre, lo cual fue captado en una cámara cuando respondió una pregunta sobre el cambio climático en un foro de CNN, reportó el Daily Mail.

Biden, de 76 años, estaba respondiendo una pregunta sobre “fracking” cuando la sangre de repente se hizo notable, debido a que la cámara lo tomó del lado izquierdo.

El exvicepresidente reconoce que es viejo, como lo indicó en octubre del año pasado, antes de ingresar formalmente a la carrera.

“Creo que es totalmente apropiado que las personas me miren y cuestionen si debería postularme nuevamente para un cargo. ‘Bueno, Dios, eres viejo’. Bueno, cronológicamente soy viejo”, dijo, “Cada votante tiene derecho a saber exactamente cómo se encuentra (el candidato). Se lo debe a ellos. Es una pregunta legítima y creo que la edad es relevante”.

Mira el video y pon especial atención en el minuto 25:04.

https://www.youtube.com/watch?v=zenJ5R0c6gg

En 1988, Biden tuvo que someterse a una cirugía de emergencia porque estalló un aneurisma; en 2003, le extirparon la vesícula biliar, además de sufrir asma y alergias, y toma un medicamento recetado para reducir su colesterol.

El Daily Mail indicó que Biden no ha revelado su historial médico desde 2008 cuando los médicos descubrieron que tenía un latido cardíaco irregular.

A finales de agosto, Biden cometió algunos errores durante entrevistas y discursos que han desatado alertas de sus críticos sobre su agudeza mental camino a la elección primaria de su partido.

“Al igual que en mi generación, cuando salí de la escuela, cuando Bobby Kennedy y el Dr. King habían sido asesinados en los años 70, finales de los 70 cuando me comprometí”, dijo Biden sobre los dos asesinatos de John F. Kennedy y Martin Luther King, que tuvieron lugar en 1968.

Luego pareció volver a la década correcta en una oración posterior, haciendo referencia a una serie de tendencias culturales que sacudieron al país durante los años sesenta.