Cuando los “benefits” son la clave
Los jóvenes empleados en administraciones estatales y municipales valoran sus pensiones y seguros pese a los salarios más bajos
Uno de los consejos más frecuentes a la hora de evaluar una oferta de trabajo es que no solo se considere el salario que se va a cobrar sino también los “beneficios” que trae el contrato.
Licencias familiares y por enfermedad, vacaciones, trabajo remoto, pero sobre todo el seguro médico y el plan de jubilación, son algunos de los términos contractuales que es importante tener en cuenta, sobre todo dado el costo de la cobertura de la salud.
En este sentido, las carreras dentro de las administraciones públicas, –ya sean federal, estatal o local– tienen un fuerte atractivo que incluso está valorado por la generación de trabajadores más jóvenes y numerosa en el mercado laboral. Según el Instituto Nacional para la Seguridad en el Retiro (NIRS) los mileniales (los nacidos entre 1981 y 1996) que trabajan para los gobiernos locales y estatales están satisfechos con sus trabajos y aunque el 80% sabe o cree que podrían ganar más en el sector privado no tienen planes de cambiar de ocupación por ello. El salario más los beneficios se consideran competitivos.
No obstante, la lealtad a ese puesto de trabajo se puede quebrar si los beneficios de sus trabajos cambiaran.
De acuerdo con el NIRS, el 78% de estos trabajadores mileniales dicen que el seguro médico que tienen con su empleo es la razón por la que eligieron trabajar en el sector público y el 77% dejaría el empleo si este se recortara. En el caso de la pensión, el 71% abandonaría el trabajo en caso de que se viera disminuida o diluida.
Incentivo a largo
En este sentido la mayor parte de los mileniales que trabajan para las administraciones públicas tienen una opinión favorable de las pensiones y las prefieren antes que las cuentas 401k. La razón es la seguridad de que se cobrará una cantidad mensualmente en el momento de la jubilación y no se estará a merced de una inversión que depende de altibajos de los mercados de valores o esté sujeta a limitaciones de uso. Curiosamente, uno de los proponentes de las cuentas de ahorro 401k dijo a The Wall Street Journal hace tres años que estas estaban pensadas para complementar las pensiones definidas y no para sustituirlos, como ha ocurrido.
El 92% de los encuestados por este centro de investigación y análisis cree que las pensiones son un incentivo para una carrera de largo plazo en el servicio público y es también mayoritario el porcentaje de trabajadores que cree que se sin ellas se debilitaría la Administración pública y servicios clave como la educación pública.
Y están alerta, porque aunque tienen confianza en su seguridad económica están preocupados por la posibilidad de recortes en los beneficios que tanto aprecian.