Reese Witherspoon habla sobre su lucha para sobrevivir en Hollywood sin explotar su sexualidad
La actriz afirmó que el humor nunca pasa de moda pero "¿A que no adivinas lo que sí se queda obsoleto? Tus te*as, cuando empiezan a caerse"
Aunque poco a poco las tornas han ido cambiando en la meca del cine, con la aparición de personajes femeninos multidimensionales que no caen en estereotipos, la tendencia generalizada hasta hace relativamente poco seguía siendo encasillar a sus actrices en dos categorías: las que interpretan a la protagonista explosiva y las que se encargan de dar vida a la amiga graciosa.
Reese Witherspoon siempre ha tenido claro a cuál de esos dos grupos pertenece a pesar de que uno de sus primeros grandes papeles, en ‘Legalmente Rubia’, iba ligado irremediablemente a su atractivo físico, pero aprovechando también su vena cómica.
“Siempre me ha molestado eso de explotar tu sexualidad porque sí. Cuando empecé en este negocio, había una serie de revistas masculinas con las que teníamos que intentar congraciarnos. Yo nunca aparecí en Maxim y nunca me eligieron para ser chica GQ, y me parece genial porque no era así como quería que me viera el público”, ha recordado en una entrevista a la revista Vanity Fair.
El lema por el que se ha guiado siempre la intérprete para construir una carrera sólida es que, a diferencia de una cara bonita, “el sentido del humor no envejece”.
“Lo único que he querido siempre es que se me considerara graciosa, no sé si me explico. Y jamás pasarás de moda si sigues siendo graciosa. ¿A que no adivinas lo que sí se queda obsoleto? Tus te*as, cuando empiezan a caerse. Tu cara también o tu cul*; todo eso acaba por irse al traste, pero siempre podrás contar con ser divertida. Y ese tipo de mujeres son mis ídolos, mis heroínas: Goldie Hawn, Holly Hunter, Diane Keaton, Nancy Meyers… Son inteligentes e hilarantes”.