Debido a que la acusación fue por medio de una denuncia del FBI, Morgan explicó que el Ministerio Público tiene 30 días para obtener una acusación formal por un Gran Jurado.De lo contrario, tendrá derecho a una vista preliminar con testigos de cargo y de la defensa.Se espera que a través del Gran Jurado la fiscalía federal someta el cargo por violación federal a la Ley de Prevención de Crímenes de Odio.La vista de detención preliminar y de fianza quedó pautada para el jueves 30 de mayo, cuando le corresponderá a cada uno declararse culpable o no culpable.El magistrado federal informó a las partes que los imputados también pudieran exponerse a cierta cantidad de años de cárcel o cadena perpetua, así como a una multa de hasta $250,000 dólares.Aunque los cargos imputados pueden conllevar la pena de muerte como condena máxima, le corresponderá al Departamento de Justicia de Estados Unidos solicitar que se busque dicho castigo.

Desde que se conoció que el FBI asumió la jurisdicción, el Comité Amplio para la Búsqueda de la Equidad (CABE) exigió a las autoridades federales que no intenten imponer la pena de muerte.

La denuncia federal se basa en la confesión de Pagán Bonilla a la Policía y al FBI sobre los hechos.

Según la confesión, Díaz de León coordinó con Pagán Bonilla para salir de la residencia para supuestamente comprar marihuana.

Añade que en el trayecto por la autopista PR-30 de Juncos a Humacao, en el vehículo de una de las víctimas, Díaz de León le disparó a ambas víctimas, antes de dejar los cuerpos dentro del auto, estacionado debajo de un puente, donde lo incendiaron.

La declaración jurada del FBI indica que Pagán Bonilla aceptó que él y Díaz de León eran los que figuraban en un vídeo publicado por una de las víctimas en las redes sociales la noche de los hechos.