Coronavirus pone a casi un millón de personas en NYC en el abismo de convertirse en desamparados
Organización WIN pronostica que si no hay una acción inmediata, quienes ya luchan por pagar la renta se verán obligados a abandonar sus hogares y buscar refugio
La boricua Ronna Love, de 59 años, sabe lo que es vivir en las calles y en las estaciones del Subway de Nueva York. A principio de año, había logrado conseguir un empleo que le permitió pagar una vivienda de bajo costo en El Bronx, para escapar de lo que describe como el “infierno de los refugios de la Ciudad”. Pero la pandemia del coronavirus la empujó de nuevo a pernoctar en “cualquier sitio”.
“Estaba trabajando en la organización Housing Work, pero por los recortes de la pandemia, perdí el empleo y la única alternativa que me dio la Ciudad, luego de dos meses sin poder pagar donde vivía, fue volver a uno de esos refugios. Ahora, lo que venía mal, es una catástrofe para todos los que estamos en esta misma situación”, cuenta la puertorriqueña.
Para el universo personal de Ronna, todo es más complicado. Como mujer transgénero convivir en los refugios es peor que una pesadilla.
“¡Allí en los shelters no hay ningún tipo de seguridad para las familias. Imagínate para mí. El acoso y el abuso sexual, es terrible. Venden drogas. Prefiero rebuscarme en las calles y en los parques. Es menos peligroso!”, dice.
El riesgo: una ola de nuevos desamparados
El estado de vulnerabilidad económica, que llevó a Ronna nuevamente a la frialdad de las calles, es un factor detalladamente analizado por organizaciones que defienden los derechos de las personas sin hogar.
El escenario proyectado es desolador: casi un millón de personas podrían perder sus viviendas en medio de esta crisis de salud pública.
“Sin una acción inmediata, muchos se encontrarán incapaces de pagar el alquiler y tendrán que recurrir al sistema de servicios para personas sin hogar (refugios), ya sobrecargado”, argumentó Christine Quinn, presidenta de Win, una organización que provee servicios de refugios y apoyo a madres sin hogar.
Los dramáticos pronósticos de Win están sustentandos en una serie de investigaciones que describen de manera detallada, cómo la pérdida de empleo por el cierre de la ciudad, a causa del COVID-19, trae muchas implicaciones, cómo el hecho preciso que el 68% de quienes han perdido sus ingresos mínimos, en esta contingencia, provienen de comunidades de color e hispanos.
Quinn, quien además fue la presidenta del Concejo Municipal, esgrime en el informe “Respondiendo a la falta de vivienda bajo los efectos del COVID-19”, que la escalofriante crisis de techos dignos para los más pobres que se podría avecinar, definirá a Nueva York en los próximos años, si la Ciudad no toma algunas medidas en los próximos días.
“Sin una acción inmediata y a largo plazo en todos los niveles del gobierno, las familias que ya luchan por pagar el alquiler y llegar a fin de mes, se verán obligadas a abandonar sus hogares y refugiarse”, pronostica la líder de Win.
Miles de niños hispanos en riesgo
Los temores de esta organización son compartidos por otras instituciones que también han quitado en las últimas semanas el velo al riesgo de que esta emergencia de salud pública se traduzca a corto plazo, en una nueva ola que inunde aún más las calles y los refugios de familias completas sin techo.
Ya el contralor de la ciudad de Nueva York, Scott Stringer, había levantado algunas banderas rojas, indicando que la crisis económica causada por el COVID-19, en su primera fase, estaba causando estragos en todos los sentidos, en los sectores históricamente más pobres de la ciudad.
“Hay 8.6 millones de historias en esta gran ciudad, y cada persona tiene sus propias necesidades. Pero podemos comenzar identificando dónde se concentran nuestras poblaciones más vulnerables para que podamos llegar de manera proactiva, obtener los recursos que necesitan”, indicó el funcionario.
Con base a las estadísticas del Contralor municipal, resulta “asombroso” que el 34% de los niños hispanos, el 27% de los niños negros y el 20% de los niños asiáticos viven por debajo del umbral federal de pobreza, en comparación con el 16% de los niños blancos.
Y justamente el riesgo de mayor sufrimiento por falta de acceso a la educación y a viviendas dignas, se recrudece en estos tiempos de pandemia.
Los inquilinos tienen derechos en la Ciudad de Nueva York y le ayudaremos a luchar por esos derechos. Si usted tiene problemas, llame al 311. Le brindaremos ayuda legal gratuita independientemente de sus ingresos o estado migratorio. pic.twitter.com/CbmS6VeSLR
— HRA (@NYCHRA) May 11, 2020
¿Tiene miedo a perder su hogar?
La Administración de Recursos Humanos de la Ciudad (DHR) ha redoblado su campaña: ¿Tiene miedo a perder su hogar?, como reacción a la avalancha de familias, que denuncian en los cinco condados, que están siendo presionadas por sus caseros para que desalojen sus viviendas, al acumular ya dos meses de moratoria de renta,
Se trata de una serie de mensajes en redes sociales, en todos los idiomas, que exhorta a los inquilinos a llamar al 311 y acceder a la ayuda legal, además a otros recursos que ofrece a la ciudad para que conozcan sus derechos en estos tiempos de pandemia.
“Sin importar su estatus legal migratorio o sus ingresos, los residentes de todo tipo de viviendas en alquiler tienen derechos. En esta emergencia de salud pública, están prohibidos por decreto estatal los desalojos y nosotros tenemos un equipo de asesores legales para ayudar a los más vulnerables”, dijo un vocero de DHR.
Entre tanto, el Departamento de Desarrollo y Preservación de Vivienda de la Ciudad (HPD) solicitó el pasado viernes a los propietarios de edificios financiados por la Ciudad, que asignen hasta el 30% de esos apartamentos para personas sin hogar.
“Debemos trabajar juntos para resolver los problemas exacerbados por esta pandemia. Estamos pidiendo a nuestros socios, que habiliten más unidades residenciales, para los neoyorquinos que experimentan la falta de vivienda“, dijo el portavoz de esa agencia, Matthew Creegan, a medios locales.
Actualmente, los proyectos habitacionales financiados por la Ciudad deben tener al menos el 15% de los apartamentos reservados para los neoyorquinos sin hogar, luego de que un proyecto de ley encabezado por el concejal Rafael Salamanca, fuese aprobado en diciembre pasado
Las cinco propuestas de WIN:
- Establecer un bono de asistencia de alquiler para emergencias, para ayudar a los inquilinos de bajos ingresos a permanecer en sus hogares.
- Crear un plan de reubicación rápido para ayudar a las familias a evitar refugios al proporcionarles alojamiento temporal (de 30 a 60 días) en viviendas para estudiantes y hoteles.
- Conversión de hoteles vacantes en refugios familiares con servicios sociales.
- Realizar ajustes de sentido común al bono de alquiler de CityFHEPS.
- Redoblar los esfuerzos para crear y preservar viviendas asequibles.
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Crisis de desempleo y sin techos:
- 1.2 millones de empleos se han perdido de manera permanente y temporal en la Gran Manzana por el cierre de la economía.
- 32% de las posiciones laborales perdidas afectan directamente a los hispanos, especialmente en el área de restaurantes y hoteles.
- 57% de los trabajadores del condado de Queens lo hacen en servicios de restaurantes y hoteles.
- 56% de la fuerza laboral en El Bronx pertenecen al área de hotelería y restaurantes.
- 63,000 desamparados se calculan viven en NYC.
- 70% de estos ‘sin techo’ son mujeres y niños.
- 24,000 son niños, en su mayoría en edad escolar.